El sector medioambiental representado por Aclima supone ya más del 5% del Producto Interior Bruto de Euskadi, genera más de 7.000 empleos directos y factura casi 3.000 millones de euros anuales.
Aclima, Basque Environment Cluster, ha celebrado su 30º aniversario consolidándose como uno de los actores clave en la transición ecológica y la sostenibilidad en Euskadi. Desde su fundación en 1995, Aclima ha sido fundamental en el impulso de un modelo económico verde que ha generado empleo, fomentado la innovación y posicionado a Euskadi como un referente internacional en la implementación de soluciones sostenibles. En la actualidad, Aclima cuenta con 139 socios, entre ellos empresas, centros tecnológicos, entidades públicas, universidades y asociaciones internacionales. El sector medioambiental de Euskadi representado por Aclima genera más de 7.000 empleos directos y facturó el pasado año más de 2.995 millones de euros.
En términos económicos, el sector medioambiental representa ya más del 5% del Producto Interior Bruto (PIB) de Euskadi, un dato que refleja el impacto creciente de las iniciativas ecológicas en la economía regional. «El sector medioambiental se ha consolidado como un eje estratégico de crecimiento económico, no solo en términos de sostenibilidad, sino también como un motor de desarrollo industrial», señala Xabier Caño, presidente de Aclima.
En este sentido, el paso de Aclima por estas tres décadas ha estado marcado por la “constante adaptación a las tendencias europeas y globales en sostenibilidad”. Tal y como explica Caño, “uno de los hitos más relevantes ha sido la alineación con el Pacto Verde Europeo y, actualmente, con el Pacto Industrial Limpio, que sirven como catalizadores para la transformación de Euskadi hacia una economía más sostenible. Durante este tiempo, Aclima ha logrado aumentar la competitividad de las empresas del sector ambiental y del resto de sectores productivos, trabajando en la integración de la sostenibilidad en la industria vasca”.
Y es que el impacto de Aclima en la creación de empleo también ha sido significativo. En los últimos años, el crecimiento del empleo en las empresas asociadas al clúster ha sido de un 8% interanual, lo que subraya la importancia de la sostenibilidad como una fuente clave de desarrollo profesional en la región.
Además, durante estos años, Aclima se ha convertido en un actor clave para la canalización de fondos públicos y privados destinados a proyectos de I+D y sostenibilidad, posibilitando a las empresas vascas adoptar nuevas tecnologías limpias, entre otros, para mejorar la eficiencia en el consumo de recursos, reducir su impacto sobre el cambio climático o gestionar y valorizar sus residuos, promoviendo, de esta manera, la economía circular y reduciendo la contaminación.
“A través de la colaboración público-privada, hemos podido canalizar importantes recursos financieros que han permitido a las empresas vascas innovar y mantenerse a la vanguardia en la Transición Ecológica. Estos fondos han sido fundamentales para llevar a cabo proyectos de alto impacto y la innovación en tecnologías, productos y servicios limpios, tanto a nivel local como internacional”, agrega Olga Martín, directora de Aclima, Basque Environment Cluster.
La innovación ha sido, es y será un eje estratégico del trabajo de Aclima. En los últimos años, el clúster ha impulsado más de 160 proyectos e iniciativas enfocados en áreas como la gestión y valorización de residuos, la descarbonización y el cambio climático, la prevención de la contaminación y la salud ambiental, la integración de soluciones basadas en la naturaleza en la planificación del territorio, y la economía circular; también han trabajado en la hibridación con otros sectores, para hacerlos más sostenibles y en la digitalización del sector medioambiental para impulsar servicios avanzados de medio ambiente, entre otros ámbitos.
Estos proyectos no solo han permitido a las empresas del clúster desarrollar nuevos servicios y productos, sino que también han fortalecido la competitividad de la industria vasca en el ámbito internacional. “La digitalización y la economía circular son el futuro del sector. A través de tecnologías como los gemelos digitales, las alertas tempranas y la gestión inteligente de los datos ambientales, nuestras empresas están liderando el camino hacia una Transición Ecológica más eficiente y efectiva”, destaca Olga Martín.
El éxito de Aclima a lo largo de estos 30 años ha sido posible gracias a la estrecha colaboración entre las empresas del clúster y las administraciones públicas. Aclima ha jugado un papel crucial como mediador y facilitador entre los diferentes actores, asegurando que las políticas públicas favorezcan el desarrollo de infraestructuras sostenibles y fomenten la creación de nuevos negocios en el sector medioambiental.
“Las políticas públicas son esenciales para guiar la transición ecológica, pero para que sean efectivas, deben ser acompañadas de un sector privado fuerte y dispuesto a invertir en innovación. Aclima ha sido un puente entre estos dos mundos, lo que ha permitido que las empresas encuentren las condiciones adecuadas para crecer y generar empleo sostenible”, subraya Xabier Caño.
A pesar de los logros alcanzados, Aclima identifica varios retos clave que deberán ser afrontados en los próximos años:
- Necesidad de infraestructuras ambientales y energéticas: La falta de consenso y la oposición local a la construcción de infraestructuras estratégicas para la gestión y valorización de residuos, la transición energética y otras áreas clave del medio ambiente sigue siendo uno de los principales obstáculos para el desarrollo del sector. Aclima llama a la necesidad de abrir un debate territorial que permita ubicar infraestructuras que son clave para el progreso industrial y sostenible de Euskadi.
- Poner en valor del sector ambiental: el sector está claramente en crecimiento por lo que es el momento para elevar el valor de los servicios medioambientales con el fin de poder equipararlos con otros servicios industriales en Euskadi. Esto incluye tanto la inversión en el desarrollo de servicios avanzados de medio ambiente por parte del sector, como el incremento del valor económico de los mismos, lo cual es clave tanto para promover la innovación como para atraer y retener el talento joven.
- Impulsar la simplificación administrativa: alineado con la tendencia marcada por Europa en la presente legislatura en el Pacto Industrial Limpio, es fundamental agilizar las tramitaciones ambientales con el objetivo de facilitar la integración de manera efectiva y eficiente de la sostenibilidad ambiental en el tejido industrial vasco.
- Reforzar la internacionalización del talento: Aunque Euskadi tiene un gran potencial en el ámbito medioambiental, aún hay espacio para posicionar mejor el talento y la especialización local en el contexto global. Aclima busca aumentar la presencia de las empresas y profesionales vascos en los mercados internacionales, especialmente en áreas como la economía circular y la descarbonización.
- Atraer talento joven: el sector medioambiental de Euskadi es un sector con propósito que trabaja en la mejora de la sostenibilidad y así es entendido por el talento joven, si bien, para mantener su competitividad, necesita atraer más jóvenes profesionales capacitados. Esto implica aumentar las oportunidades de formación y empleo verde a través de programas educativos y proyectos de investigación que permitan a las nuevas generaciones involucrarse en la transición ecológica de manera activa.
- Superar el desajuste entre el sector público y privado: Existe una creciente desconexión entre el ámbito técnico del sector público y privado, lo que limita la colaboración efectiva en ciertos proyectos. Aclima apuesta por el respeto mutuo y la igualdad de capacidades, entendiendo que tanto el sector público como el privado deben trabajar juntos para afrontar los retos globales, como el cambio climático, de manera conjunta.
Mirando al futuro, Aclima se compromete a seguir liderando la transición ecológica en Euskadi bajo el lema “Follow Us”, que refleja la posición determinante del sector medioambiental como representante y líder del cambio en el camino de toda la industria hacia un modelo económico que imperativamente debe ser más sostenible.
“Aclima seguirá siendo un referente en la integración del medio ambiente en la industria. Nuestra misión para los próximos años es consolidar a Euskadi como un modelo a seguir en sostenibilidad, contribuyendo al desarrollo de soluciones limpias e innovadoras que favorezcan una economía baja en carbono y circular, competitiva y socialmente responsable”, concluye Xabier Caño.