Aumenta la generación de residuos en Gipuzkoa durante el confinamiento por el COVID-19

La producción de residuos urbanos en Gipuzkoa se ha incrementado un 6,7% durante el estado de alarma, debido principalmente a un aumento de la fracción resto generada en los hogares.

El presidente del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) y diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, realizó el pasado lunes balance de los resultados de la recogida y tratamiento de residuos durante el periodo de emergencia sanitaria por el COVID-19. Según los datos obtenidos por el Consorcio, a partir de las basuras tratadas directamente por GHK, la generación de residuos ha aumentado en torno a un 6,7% sobre las cifras del mes de enero, pasando de 15.293 toneladas a las 16.328 previstas para el presente mes de abril.

Este incremento se debe principalmente a que la fracción resto ha crecido un 11,3% en el mismo período, pasando de 10.446 toneladas hasta las 11.626. Los envases tratados en la planta de Legazpi también han experimentado un ligero incremento del 7,4%, pasando de 841 toneladas en enero a las 904 estimadas para abril. En cambio el biorresiduo sufre un pequeño descenso de un 5% y las 4.006 toneladas de enero quedan en 3.798.

Estas variaciones responden, según la Diputación Foral de Gipuzkoa, a variables diversas, como el incremento de consumo en los hogares por el cierre de la hostelería o la reducción de algunas fracciones de reciclaje por las indicaciones para depositar los materiales en contacto con personas enfermas, así como las mascarillas y guantes en los contenedores de resto. En cualquier caso, será necesario contar con datos más exhaustivos para extraer más conclusiones.

Tratamiento de la fracción resto

Las más de 11.000 Tn. mensuales de fracción resto recogidas mensualmente están siendo tratadas en su práctica totalidad en el Complejo Medioambiental de Zubieta, a pesar de que sus instalaciones están todavía en período de pruebas. En la actualidad, el 100% de la fracción resto recogida en Gipuzkoa está pasando por la planta de tratamiento mecánico-biológico, que tras separar los materiales reciclables envía un 80% a la planta de valorización energética para producir energía eléctrica, mientras que el 20% restante se envía a Bizkaia, en el marco del convenio firmado con este territorio del que se está aplicando el mínimo de toneladas previsto.

Asensio subrayó la importancia de que Gipuzkoa disponga en estos momentos de unas infraestructuras que, a pesar de encontrarse todavía en período de pruebas, han permitido seguir prestando el servicio de recogida y tratamiento de residuos de manera normalizada y proteger la salud pública aplicando los protocolos establecidos por las autoridades sanitarias y el Ministerio de Transición Ecológica. «Gracias a las nuevas infraestructuras, los residuos no han representado un problema en la actual emergencia sanitaria y la ciudadanía ha recibido un servicio, moderno y eficaz, en el que Consorcio, mancomunidades y ayuntamientos han trabajado de manera coordinada».

Casi 34.000 EPI distribuidos entre los trabajadores

En relación al trabajo desarrollado con las mancomunidades, Asensio destacó que, a pesar de no estar en el ámbito de su competencia, desde el Consorcio se han adquirido y puesto a disposición de todas las mancomunidades un total de 33.920 equipos de protección individual (EPI) para garantizar que las personas que trabajan en la recogida pudieran realizar su cometido de forma segura. En concreto, se han distribuido, entre otros equipos, 19.000 pares de guantes, 9.900 mascarillas FPP2, 2.000 buzos desechables, 1.200 batas y delantales y 159 litros de gel hidroalcohólico.

Asensio destacó “el magnífico trabajo” realizado por todo el equipo humano de GHK y extendió su agradecimiento a todas las personas que trabajan en la recogida de residuos. «Gracias a su colaboración estamos resolviendo el día a día de un servicio básico para la ciudadanía y esencial para la salud pública», concluyó.