Las subvenciones se destinarán a proyectos de prevención, reutilización y reciclaje de residuos industriales, recuperación de suelos contaminados, uso de áridos reciclados y retirada de amianto.
El Consejo de Dirección de la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC) aprobó la semana pasada destinar 7,5 millones de euros a varias convocatorias de ayudas económicas para fomentar mejoras en la gestión de los residuos. La totalidad de estos fondos proceden de los cánones de residuos, que graban opciones de gestión finalistas como el destino a depósito controlado, incineración y valorización energética. Por el contrario, incentivan la recogida selectiva y el reciclaje de los residuos.
Estos fondos se destinan también a la creación y mejora de nuevas infraestructuras (plantas de tratamiento, puntos limpios) y permiten convocar anualmente baterías de ayudas destinadas a diversos públicos (entes locales, empresas, etc.) para mejorar la gestión de los residuos, con procesos avanzados para prevenir nuevos residuos y valorizar los generados.
Destino de las ayudas
Respecto a las subvenciones aprobadas, las dotaciones para la recuperación de suelos contaminados, para proyectos de prevención, preparación para la reutilización y reciclaje de residuos industriales y para la convocatoria “Núcleos de investigación”, gestionada con ACCIÓ, suman en total 3 millones de euros.
La dotación económica de la convocatoria para la utilización de los áridos reciclados de los residuos de la construcción y la ampliación de capital de la convocatoria de ayudas para la retirada en origen de materiales que contengan amianto, correspondiente al 2021, suman 3,3 millones de euros.
Por otra parte, la ARC ha aprobado también una dotación presupuestaria de 1,2 millones de euros para la convocatoria de ayudas para proyectos de prevención, preparación para la reutilización y reciclaje de residuos industriales con fondos procedentes de la Generalitat de Cataluña.
Retirada de amianto
En cuanto a las ayudas destinadas a la retirada de amianto, existe un compromiso de la Generalitat de Cataluña para erradicarlo. Para ello se constituyó la Comisión Interdepartamental para la erradicación del amianto en Cataluña y estas ayudas van en la línea de las acciones que promueve la Comisión, según la normativa europea que persigue la eliminación segura del amianto.
Este producto está prohibido en Cataluña desde 2001, aunque se calcula que el amianto instalado todavía supone más de cuatro millones de toneladas de fibrocemento, gran parte del cual ha llegado o está llegando al final de su vida útil . La convocatoria de ayudas para la retirada de amianto tenía una dotación inicial de 2 millones de euros, que se ha ampliado con un millón de euros más.
El director del ARC, Isaac Peraire, afirmó que “Cataluña ha sido pionera en el cambio, al disminuir el uso de los sistemas finalistas, para abrir la circularidad en la recuperación de materiales, y esto gracias a los cánones que desde hace años se introdujeron en el modelo”. En este sentido, director de la agencia expuso que “en el ámbito municipal, en 2004 Cataluña llevaba a vertedero 3,2 millones de toneladas, en 2010, 2,3 millones de toneladas y en 2020, 1,3 millones de toneladas”.
El 100% de los fondos de los cánones recaudados se devuelven para financiar una gestión sostenible de los residuos. En el caso de los residuos municipales, este impuesto creado en 2004, pionero en España, ha permitido financiar el despliegue de la recogida selectiva de la fracción orgánica en Cataluña. Hoy día prácticamente la totalidad de los municipios del territorio disponen de servicio de recogida selectiva de la materia orgánica.