El acuerdo incluye la construcción y gestión de una planta de pirólisis para procesar residuos plásticos que no se puedan reciclar mecánicamente.
BASF, Quantafuel y Remondis han firmado un Memorando de Entendimiento (MoU, por sus siglas en inglés) para evaluar conjuntamente una cooperación en reciclaje químico que incluye una inversión conjunta en una planta de pirólisis para residuos plásticos.
La compañía de gestión de aguas y residuos Remondis tiene previsto suministrar residuos plásticos adecuados a la planta, y BASF utilizará el aceite de pirólisis resultante como materia prima en sus centros de producción integrados ( Verbund) como parte de su proyecto ChemCyclingTM. Por su parte, Quantafuel proporcionará la tecnología y operará la planta. La empresa es especialista en la pirólisis de residuos plásticos mixtos y la purificación del aceite de pirólisis resultante. La tecnología se desarrolla conjuntamente y se lleva a cabo con BASF. La ubicación de la planta de pirólisis se evaluará conjuntamente.
Cada año, casi 20 millones de toneladas métricas de residuos plásticos en Europa no se reciclan. Al establecer el reciclaje químico como una solución complementaria al reciclaje mecánico, es posible devolver más residuos plásticos al ciclo de los materiales, que de otro modo serían incinerados.
La tecnología de pirólisis se puede utilizar para procesar un importante volumen de residuos plásticos que no se reciclan mecánicamente, bien por razones tecnológicas o económicas. Para maximizar una economía circular para los plásticos, las empresas participantes identificarán cuáles de los flujos de residuos plásticos proporcionados por Remondis podrían someterse a un reciclaje químico en el futuro.
Utilizar materia prima que no se habría reciclado
“BASF se ha fijado el objetivo de procesar 250.000 toneladas métricas de materia prima reciclada anualmente a partir de 2025. En este sentido, es importante utilizar materia prima derivada de residuos plásticos que de otro modo no se habrían reciclado”, explica Lars Kissau, vicepresidente senior de Desarrollo Comercial Estratégico Global en la división de Petroquímicos de BASF.
“La asociación con empresas del sector de la gestión de residuos y el reciclaje, así como con proveedores de tecnología innovadora, es una cooperación ideal para construir un modelo de economía circular sostenible para los residuos plásticos que antes no se reciclaban. Sin embargo, resolver el desafío de los residuos plásticos solo será posible en un entorno regulatorio favorable «.
Jürgen Ephan, director general de Remondis Recycling, destacó la importancia del proyecto conjunto: “Para alcanzar los objetivos de sostenibilidad marcados por el Green Deal de la Unión Europea, es fundamental incrementar las cuotas de reciclaje siempre que sea técnica y económicamente viable. Creemos que el reciclaje químico puede proporcionar una contribución significativa”.
La legislación a nivel nacional y de la UE creará el marco para el reciclaje químico y, por lo tanto, dará forma a la capacidad de cómo puede contribuir a una economía más circular para los plásticos. Esto incluye reconocer que los productos basados en materias primas recicladas químicamente se cuentan para lograr los objetivos de contenido reciclado.
El aceite de pirólisis derivado de los residuos plásticos alimenta a la producción del centro de producción integrado de BASF y, de este modo, ahorra la misma cantidad de recursos fósiles. Dado que el aceite de pirólisis se inserta directamente al comienzo de la cadena de valor químico, los productos de venta final tienen exactamente las mismas propiedades que los productos elaborados a partir de materias primas fósiles. La parte de material reciclado se asigna a los productos finales de acuerdo con el enfoque de balance de masa certificado por un tercero que permite a BASF ofrecer productos certificados que llevan el sello CcycledTM.