El consorcio europeo, compuesto por 10 socios, establecerá una cooperación entre organizaciones benéficas y la industria de productos biobasados que ayude a identificar soluciones sostenibles para la gestión de residuos sólidos en diversos entornos humanitarios.
Aimplas, Instituto Tecnológico del Plástico, participa en el proyecto Bio4HUMAN de Horizonte Europa, cuya misión es abordar los desafíos ambientales de los residuos relacionados con el envío de ayuda en contextos humanitarios.
«La crisis de la gestión de residuos sólidos en entornos humanitarios está aumentando y es necesario abordarla de forma urgente mediante soluciones, sistemas y tecnologías innovadoras relacionadas con productos biobasados. Para ello, Bio4HUMAN reunirá, por primera vez, a organizaciones humanitarias, actores de la industria de productos biobasados y expertos en economía circular. El objetivo inmediato es proporcionar resultados a dos ubicaciones que reciben ayuda humanitaria en África. Sin embargo, la perspectiva es identificar soluciones potenciales que se puedan aplicar en futuros desafíos humanitarios en Europa e internacionalmente», ha explicado la coordinadora del proyecto, Andrea Ratkošová, de Enspire Science.
Para tener éxito en este propósito, los socios de Bio4HUMAN llevarán a cabo un ejercicio de exploración para desarrollar una lista de soluciones e identificar brechas existentes en la cadena de suministro de la gestión de residuos sólidos. Hasta ahora, no hay estudios sobre el tema. El consorcio realizará evaluaciones del ciclo de vida de las soluciones propuestas y evaluará su aplicabilidad en términos socioeconómicos y de gobernanza. Además, explorarán si las soluciones cumplen con el propósito de las partes interesadas clave en la gestión de residuos sólidos y examinarán la posibilidad de su aceptación por parte de la comunidad, las empresas y las autoridades locales. Bio4HUMAN llevará a cabo un proceso de evaluación de viabilidad en dos ubicaciones africanas: la República Democrática del Congo (RDC) y Sudán del Sur, donde las organizaciones humanitarias del consorcio ya están activas.
Finalmente, el proyecto desarrollará y difundirá un conjunto de herramientas para actores humanitarios (organizaciones de financiación y apoyo) que deseen explorar e implementar las soluciones biobasadas propuestas para que funcionen de manera sostenible y ofrezcan circularidad al entregar ayuda humanitaria.
«En crisis, cuando nos centramos en las personas y su bienestar, podemos olvidar fácilmente el aspecto de los residuos generados tanto por los actores humanitarios como por los destinatarios de la ayuda. Como resultado, los residuos sólidos pueden acumularse rápidamente y en grandes cantidades, representando un verdadero desafío para la población local. Es precisamente el caso de Sudán del Sur, principalmente debido a su clima y condiciones económicas, sin un sistema de gestión de residuos en funcionamiento. Trabajamos en esta región desde 2006 y estamos muy interesados en las soluciones innovadoras que podrían mejorar la vida cotidiana en el país», ha enfatizado Ludwika Klejnowska, coordinadora del proyecto de Polish Humanitarian Action (PAH).
«La República Democrática del Congo, y especialmente el este del país donde trabajamos como People in Need, ha estado afectada durante mucho tiempo por conflictos armados y el saqueo de recursos naturales. El impacto de la guerra en el sustento de la población se refleja en su relación con el medio ambiente, especialmente en los ecosistemas frágiles que enfrentan una explotación sin precedentes en la Cuenca del Congo y los Grandes Lagos. Estas son también las áreas más pobladas y que necesitan un gran apoyo de emergencia. Encontrar formas de conectar la ayuda humanitaria y el tratamiento adecuado del medio ambiente se convierte en un aspecto clave de las crisis humanitarias, con la economía circular y la gestión de residuos en el núcleo. Dentro del pensamiento y las prioridades de People in Need, la resiliencia climática en crisis humanitarias es un pilar clave del programa que queremos abordar a nivel mundial, específicamente para la RDC. Estamos emocionados por formar parte del equipo Bio4HUMAN y contribuir a esta asociación única desde nuestra perspectiva como actores humanitarios», ha explicado el coordinador del programa en el país, Ondrej Suchanek, de People in Need.
Para tener un impacto en toda Europa, se implementarán varias actividades, como la creación de pautas, herramientas y materiales de fácil acceso, para fomentar las soluciones identificadas por Bio4HUMAN que puedan replicarse en toda Europa e internacionalmente.
Bio4HUMAN prevé una serie de actividades de clustering con el proyecto WORM (Waste in Humanitarian Operations: Reduction and Minimisation), otro proyecto con el mismo objetivo financiado por el Programa Horizonte Europa. El objetivo general de WORM es diseñar pautas y acciones de apoyo para iniciativas de economía circular en el sector humanitario. WORM se centra en dos entornos seleccionados: despliegues de hospitales de campaña y programas humanitarios de sustento con un componente de recolección de residuos.