La empresa eligió el Complejo Medioambiental de Valsequillo (Málaga) para dar a conocer los nuevos modelos, uno de los cuales se ha cedido durante un año a la planta de tratamiento gestionada por el Consorcio Provincial de RSU.
La multinacional Bomag ha elegido el Complejo Medioambiental de Valsequillo para la presentación mundial de su nueva generación de máquinas compactadoras. Se trata de los modelos BC 572 RB y BC 472 RB, siendo el segundo el que estará en funcionamiento en la citada planta de tratamiento, después de que la multinacional haya cedido una unidad para su uso durante un año al Consorcio Provincial de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), organismo dependiente de la Diputación de Málaga.
La diputada de Medio Ambiente y presidenta del Consorcio de RSU, Marina Bravo, que asistió al acto de presentación en Valsequillo, explicó que la máquina cumple la tarea de compactar los residuos que se depositan en los vasos de vertido del complejo medioambiental, “lo que permite ahorrar espacio y por tanto, alargar la vida útil de los vertederos, siendo su colmatación mucho más lenta”.
Concretamente, la nueva máquina permite una densidad de compactación de 1.200 kilogramos por metro cúbico.
El uso de la tecnología más puntera en el sector permite “abaratar costes” recordó Bravo, al tiempo que informó de que el complejo servirá como espacio de prueba y desarrollo de la nueva maquinaria por parte de Bomag, cuyo precio por unidad ronda los 400.000 euros.
Asimismo, la presidenta del Consorcio Provincial de RSU subrayó la elección de Valsequillo para esta presentación mundial por parte de Bomag –una cita a la que acudieron representantes de más de 60 empresas e instituciones de toda Europa–, dado el buen funcionamiento e índices de producción y tratamientos de residuos que registra el complejo medioambiental.
Bravo recordó que las máquinas actuales de Valsequillo fueron adquiridas por concurso público durante el ejercicio 2009-2010. Concretamente, el modelo compactador que está en servicio y que será reemplazado durante este año por la nueva unidad, ha estado en funcionamiento más de 20.000 horas durante estos cinco años, “trabajando muy bien, sin problema, así que está más que amortizada su compra”, resaltó la diputada. Al igual ocurre con el modelo, un poco más pequeño, que se utiliza en el vertedero de Casarabonela.