Bruselas abre una consulta pública sobre los bioplásticos

Los plásticos de base biológica, biodegradables y compostables representan actualmente el 1% del mercado mundial y europeo de los plásticos.

La Comisión Europea ha puesto en marcha una consulta pública sobre los plásticos de base biológica, biodegradables y compostables con el objetivo de obtener información para preparar un nuevo marco político sobre estos grupos de plásticos. El objetivo del nuevo marco -un producto clave del Acuerdo Verde Europeo y del Plan de Acción para la Economía Circular- es abordar los nuevos retos de sostenibilidad relacionados con el uso de los bioplásticos, impulsando la innovación, mejorando la seguridad de las inversiones en el mercado interior y aumentando la protección del medio ambiente.

El Comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevičius, ha declarado que «los plásticos de base biológica, biodegradables y compostables tienen el potencial de aportar ventajas sobre los plásticos tradicionales. Sin embargo, tenemos que evaluar a fondo si estos plásticos cumplen sus promesas y en qué condiciones. También hay que aportar claridad al mercado para que los consumidores y las empresas puedan entender fácilmente las diferencias entre estos plásticos».

Los plásticos de base biológica, biodegradables y compostables representan actualmente el 1% del mercado mundial y europeo de los plásticos, con un crecimiento global previsto del 5-8% entre 2020 y 2025. En la actualidad, estos tipos de plásticos se utilizan predominantemente para fines específicos de envasado y agrícolas, ofreciendo ventajas como la biodegradabilidad o la compostabilidad.

La consulta sigue a la publicación de la hoja de ruta que esboza el objetivo del marco: abordar los nuevos retos de sostenibilidad relacionados con el uso de los bioplásticos. En concreto, establece las siguientes áreas políticas que deben explorarse:

Área política 1: La sostenibilidad de la materia prima biológica utilizada para producir plásticos de base biológica

El uso de materias primas biológicas en lugar de materias primas fabricadas a partir de combustibles fósiles puede ayudar a reducir el impacto medioambiental de los plásticos en todo su ciclo de vida. Sin embargo, hay que tener en cuenta el impacto medioambiental de todo el ciclo de vida, incluidos los cambios en el uso del suelo, la biodiversidad y el impacto climático, así como los residuos. En la actualidad, no se aplican criterios de sostenibilidad de la UE a estos plásticos, mientras que los consumidores esperan que sean totalmente sostenibles.

Área política 2: La biodegradación efectiva de los plásticos biodegradables y compostables y su papel en una economía circular

Estos plásticos solo pueden aportar beneficios medioambientales si su biodegradación puede verificarse mediante normas. Mientras que existen normas europeas para algunos medios, como el compostaje industrial, no existen normas europeas para los plásticos biodegradables en otras condiciones, como el medio marino. Además, los principios de la economía circular y de la «jerarquía de los residuos» sugieren que sólo se utilicen estos plásticos para fines limitados y específicos para los que la reducción, la reutilización y el reciclaje no son factibles o deseables.

Área política 3: confusión generalizada

Aunque estos plásticos tienen muchas similitudes, también tienen muchas diferencias. En la actualidad, los consumidores y usuarios de estos plásticos no tienen acceso a una información clara y fiable a la hora de comprar o desechar estos plásticos. El etiquetado sólo puede ayudar cuando es claro y completo. Además, si estos plásticos se eliminan de forma incorrecta, podría producirse una contaminación cruzada de los flujos de residuos y, por tanto, una menor circularidad de los plásticos.

La consulta se ha publicado en el sitio web de la DG ENV y está abierta a comentarios hasta el 15 de marzo de 2022. Los servicios de la Comisión tendrán en cuenta los comentarios cuando preparen el marco político sobre plásticos biobasados, biodegradables y compostables, cuya adopción está prevista para el verano de 2022.