Tras una prueba piloto realizada el año pasado, la compañía ha empezado a comercializar en diversos puntos del país la botella de PET con el tapón unido a ella, según los requisitos de la directiva europea de plásticos de un solo uso.
Si el año pasado Coca-Cola anunciaba que España se convertía en el primer país que realizaba una prueba piloto de los tapones adheridos a la botella, es ahora cuando los nuevos tapones llegan al mercado español de manera definitiva.
Con este lanzamiento, la compañía se adelanta a los requisitos de la directiva europea sobre plásticos de un solo uso, que entrará en vigor en julio de 2024, y espera facilitar e incentivar el reciclaje entre sus consumidores.
Un total de 75 millones de envases con los nuevos tapones se fabricarán hasta finales de 2022 en las plantas de Barcelona y Sevilla de Coca-Cola, aunque a lo largo de 2023 y 2024 se irán convirtiendo el resto de plantas para que todos los envases de plástico tengan el nuevo tapón.
Así, desde este mes, ya se puede encontrar el nuevo tapón en los envases de plástico de las marcas Coca-Cola, Fanta, Sprite y Nordic Mist (en formato 500ml, 1 l, 1,25 l y 2 l). Inicialmente habrá una mayor cobertura en Andalucía, Extremadura, Cataluña, Baleares, Castilla-La Mancha y Aragón, aunque también estarán presentes en otros puntos del país.
A lo largo de 2023 y de 2024 se seguirá extendiendo su llegada a todos los puntos del país y a todos los envases de plástico PET de marcas de Coca-Cola, tanto bebidas con gas, sin gas y agua.
Estos nuevos tapones han sido desarrollados en el centro de I+D de Coca-Cola en Bruselas a partir de los diseños propuestos por sus proveedores. Se han realizado pruebas entre los consumidores para desarrollar una solución que ofrezca una experiencia cómoda y agradable de consumo, garantizando la seguridad y calidad y que, a la vez, se adapte a los requisitos de la directiva europea.
La introducción del tapón adherido a la botella es un proceso innovador y complejo. El sistema de apertura es el mismo que el de la botella estándar. Sin embargo, la innovación radica en un enlace formado por dos brazos dispuestos entre el anillo que rodea el cuello de la botella y el tapón, y una lengüeta de tope que se ha incorporado al tapón, de manera que se mantiene el tapón unido al envase y fijo una vez desenroscado, a la vez que sigue permitiendo su cierre hermético.
“Buscamos utilizar nuestros recursos y canales para impulsar un cambio duradero en el comportamiento de los consumidores, es decir, que disfruten de sus bebidas, pero fomentando también la recogida y el reciclaje del envase”, apunta Ana Gascón, directora de la Estrategia de Sostenibilidad de Envases para Europa en The Coca-Cola Company. “Los tapones adheridos a la botella llegan a España precisamente para facilitar a los consumidores este proceso de recolección y recogida, ya que este nuevo sistema permite reciclar la botella junto al tapón, evitando así su pérdida”.
Para reforzar esta sensibilización de los consumidores, Coca-Cola ha introducido mensajes tanto en el nuevo tapón (“Estoy unido para reciclarme mejor”) como en los materiales visuales del punto de venta con el doble objetivo de explicar a sus clientes el funcionamiento del nuevo cierre y para incentivar la recogida y el reciclaje del envase completo.