La contaminación, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad contribuyen a las resistencias a los antimicrobianos. El uso adecuado de los antibióticos es clave para la salud y el medio ambiente, y finaliza cuando se depositan sus residuos en el Punto SIGRE.
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) figura en la lista de la Organización Mundial de la Salud como una de las 10 principales amenazas mundiales para la salud humana. Según una reciente investigación publicada por The Lancet, se estima que la RAM podría matar en el próximo cuarto de siglo a más de 39 millones de personas de forma directa y a otros 169 millones indirectamente.
La RAM requiere una respuesta mediante el enfoque «Una sola salud», que tenga en cuenta que la salud de las personas, de los animales, de las plantas y del medio ambiente están estrechamente vinculadas y son mutuamente dependientes. La prevención es el pilar fundamental para luchar contra la aparición y propagación de las resistencias a los antimicrobianos, siendo la protección del medio ambiente una parte clave de la solución.
¿Por qué el medioambiente es clave? La triple crisis planetaria −la contaminación, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad− provoca temperaturas más altas, patrones climáticos extremos, contaminación biológica y química y cambios en el uso de la tierra que alteran la diversidad microbiana. Todos estos factores son un caldo de cultivo para el aumento de la RAM, según el informe “Bracing for Superbugs: Strengthening environmental action in the One Health response to antimicrobial resistance”, publicado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Ante esta realidad, el sector farmacéutico viene mostrando su compromiso en la lucha contra las resistencias bacterianas, no solo a través de su importantísima contribución a la investigación de nuevos antibióticos y al buen uso de los mismos, sino también impulsando medidas, a través de SIGRE, que bajo el enfoque «Una sola salud» permitan abordar esta lucha desde una triple perspectiva: salud, medio ambiente y sensibilización.
Desde el plano de la salud, SIGRE fomenta la revisión periódica de los botiquines. Una vez finalizado un tratamiento, es necesario que los medicamentos que puedan sobrar y sus envases se lleven a la farmacia y se depositen en el Punto SIGRE, reduciendo así la tentación de una automedicación incontrolada, un aspecto clave en el correcto uso de los antibióticos.
En el ámbito del medio ambiente, SIGRE gestiona la recogida y el tratamiento de los restos de antibióticos depositados en los contenedores de las farmacias, evitando así la contaminación de los ríos y suelos que se produciría si los tiráramos a la basura o por el desagüe. Esta práctica permite, a la vez, reciclar los materiales de los envases para darles un nuevo uso, ahorrando el consumo de materias primas vírgenes.
Como indica Miguel Vega, director general de SIGRE, “todos los medicamentos, incluidos los antibióticos, incluyen en su prospecto una leyenda para promover entre los ciudadanos la adecuada eliminación de sus residuos, tanto restos de producto como envases, a través del Punto SIGRE de las farmacias”.
Un tercer factor clave de la contribución de SIGRE a la lucha contra este importante problema es la sensibilización social. Ejemplo de ello es el lanzamiento de la campaña de concienciación a nivel nacional “Reciclar es el mejor tratamiento para el planeta”, que pone especial énfasis en el uso adecuado de los antibióticos, la importancia del cumplimiento de los tratamientos y los beneficios de una correcta gestión ambiental de sus residuos.
También, con el objetivo de impulsar este enfoque integral, SIGRE acaba de adherirse a la Plataforma One Health, una red de ámbito estatal que aúna los esfuerzos de organizaciones colegiales nacionales, asociaciones y fundaciones pertenecientes a diferentes ámbitos y sectores, con el objetivo de alcanzar un mayor grado de protección de la salud de las personas, reducir las inequidades en salud, y progresar en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).