Un supermercado sin envases de un solo uso, una empresa que fabrica zapatillas con residuos, otra que vende portabocadillos reutilizables… El Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada ha elaborado su particular top ten de empresas de economía circular.
El Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada ha creado un grupo de análisis y seguimiento del desarrollo de la economía circular en las empresas. Su valoración general es positiva al constatar que los operadores consideran que una actuación sostenible es ineludible en el ámbito de los negocios y que no hay otra opción. Se podría afirmar que “ser sostenible, vende”. Pero ha querido extender su análisis más allá de las estrategias y entrar en las cuestiones prácticas: ¿qué se está haciendo en el día a día para convertir en realidad ese objetivo circular?.
Para ello, ha examinado a numerosas empresas de muy diferentes ámbitos, y dejando a un lado las grandes corporaciones, a las que se supone bien dotadas de capital y recursos humanos para logar objetivos, se ha centrado en empresas de tipo medio, y algunas pequeñas, en las que el empuje, la concienciación, el compromiso y la creatividad suponen esfuerzos reales en la búsqueda de ese ideal circular.
El equipo ha analizado empresas que han revolucionado su operativa para reciclar o minimizar su impacto ambiental y empresas que han visto que reinventar productos con lo que otros tiran es un buen negocio e impulsa la circularidad. De todas ellas ha efectuado una selección con las que ha elaborado su particular TOP 10 de Empresas de Economía Circular 2019, y que se expone a continuación.
- Aquaservice. Proporciona a sus clientes botellas reutilizables de 20 litros (una forma de consumo sostenible única dentro del sector) y en cada reparto se recogen los envases vacíos, que son higienizados y reutilizados para el posterior rellenado. Al ser envases reciclables, cuando terminan su vida útil, se recupera su materia prima y se generan nuevos productos, respondiendo así a la normativa europea que busca la reducción del consumo de plásticos de un solo uso. También se lleva a cabo el mantenimiento del dispensador, de bajo consumo eléctrico y sin obsolescencia programada, con un programa de reparación y reacondicionamiento para alargar al máximo su vida útil.
Además, está impulsando medidas encaminadas a mejorar la eficiencia, reducir las emisiones y, por tanto, la huella de carbono. Cuenta con la mayor flota híbrida de camiones especializados en reparto de España y han introducido modernos sistemas de optimización de rutas, que han permitido reducir las distancias un 40% en los últimos 3 años, así como un innovador sistema de reparto mediante camión-almacén para control y recorte de emisiones, realizando ya más del 30% de las entregas a pie sin desplazamiento del vehículo.
- Boc’n’Roll. Llevarse un bocadillo de excursión o al cole. Abrirlo, tirar el envoltorio y comérselo. Economía lineal al más puro estilo hasta que alguien decidió hacer circular el proceso e inventó un envoltorio portabocatas ecológico y reutilizable. Una idea sencilla, pero que ha creado tendencia y ya hay porta snacks y portatuppers. No envuelvas el bocadillo, vístelo, dice en Roll’eat, la dueña de la idea.
- Camper. ¿Se pueden fabricar zapatillas de alta gama con residuos? Camper lo intenta. Al menos en parte de sus zapatillas. Empeines, forros y cordones de su emblemático modelo Pelotas están fabricados ya con plástico procedente de residuos industriales, botellas, retales…, que convierte en materia textil en colaboración con Ecoalf, otro líder en valorizar residuos. De momento es un proyecto pequeño, pero con enorme potencial para cambiar los modos de una industria, la de la moda, muy vinculada a la cultura del usar y tirar.
- Ecodicta. La industria de la moda es una de las más contaminantes. La prenda más ecológica es la que ya está fabricada. ¿Cómo reutilizar la ropa, algo tan personal? Ecodicta tiene unan propuesta. Es un sistema de alquiler de ropa mensual en el que el usuario paga una cuota y puede tener acceso a varias prendas que devuelve al cabo de los treinta días. Ropa de calidad, duradera, que puede ser reutilizada hasta veinte veces. Un modelo que quiere acaba con los armarios llenos de ropa que no se usa y que acaba no se sabe muy bien ni dónde y ni cómo. Un modelo con sus limitaciones pero que está fomentando una forma diferente de usar la ropa.
- Nice to eat you (Encantado de comerte). Un restaurante tipo que sirva unas 120 comidas al día tira cada año a la basura unos 3.000 kilos de comida no utilizada y en buen estado de consumo. Una comida que tiene un valor de unos 10.000 euros. ¿Cómo valorizar eso que ahora va a la basura? Una de las respuestas la proporciona esta start-up, que ha ideado una plataforma online que pone en contacto a restaurantes con comida sobrante y usuarios con pocas ganas de cocinar y muchas de comer barato. Cada día los restaurantes proponen en la aplicación su propuesta culinaria, los clientes cierran los precios, pagan a través de la plataforma y recogen su comida a la hora fijada. Los descuentos rondan el 40%. La idea se ha ampliado a comercios de alimentación, como fruterías o panaderías que utilizan el mismo sistema.
- PackBenefit. Los envases son en gran medida la zona cero de la generación de residuos con impacto ambiental. Conseguir que sean no solo biodegladables sino compostables, que se conviertan en abono orgánico en poco tiempo, es el objetivo prioritario para racionalizar su uso. En PackBenefit utilizan celulosa con un recubrimiento de almidones de maíz y patata para producir bandejas de todo tipo destinadas a la industria alimentaria. Una vez utilizadas van directas al cubo de la basura orgánica para su transformación en compost. Son la alternativa a las bandejas de poliestireno (corcho blanco), de difícil reciclaje y que ya están prohibidas en ciudades como Nueva York.
- Solteco. Madera plástica hecha con residuos con la que producen planchas y perfiles con los que elaborar una amplia gama de productos como palés, plataformas, papeleras, bancos, mesas, equipamiento agropecuario, pavimentos, pasarelas, vallados, etc. Casi todo fabricado con deshechos que rechaza buena parte de la industria de reciclado. Detrás hay un componente tecnológico y de innovación casi único en España.
- Ternua. Esta empresa vasca fabrica prendas deportivas para montañismo y actividades al aire libre y ha desarrollado procesos tecnológicos que permiten utilizar materiales de desecho para la producción de sus tejidos. Utilizan restos de alfombras y de redes de pesca para producir un nuevo tejido totalmente reciclado; con los restos de botellas de plástico producen poliéster reciclado; las plumas del interior de sus chaquetas y pantalones de montaña procede de edredones y almohadas recicladas; utiliza granos de café para aplicar tratamientos antiolor a sus prendas y prescindir de los tóxicos PFC, y con residuos agrícolas crea tintes para colorear sus prendas.
- Yes Future. Uno de los paraísos -o infiernos- del plástico y del envase de todo tipo es el supermercado. Se necesitan modelos nuevos de retail que permitan reducir tal cantidad de envases. Yes Future intenta implantar un modelo de supermercado sin envoltorios de usar y tirar. Supera el concepto habitual de venta de graneles de alimentación y lo amplía a otros productos como los de limpieza o aseo personal. Envases de vidrio, bolsas de papel, lo que cada uno lleve para rellenar un bote de detergente, pasta de dientes, arroz o miel. Frente a lo insensato de envasar todo, este modelo intenta poner un poco de sensatez en el consumo diario.
- Zicla. Elementos de movilidad urbana como señalizadores de carril bici o bus, jardineras decorativas, plataformas para paradas de autobuses urbanos…, son de plástico y los fabrica esta empresa con residuos industriales de todo tipo, todos ellos procedentes de plantas de tratamiento o de proyectos de recuperación. También es capaz de utiliza los materiales más innobles, los que rechazan las propias plantas de reciclado y que acaban en los vertederos. Ha desarrollado tecnología y procesos que le permiten establecer planes para determinar el potencial de revalorización de los residuos que produce cualquier industria.