El proyecto ECOBIONET que coordina AIMPLAS ha recibido el premio como mejor proyecto europeo de la Comunidad Valenciana 2013 en la modalidad de Innovación por una malla biodegradable para cítricos y moluscos.
El Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS) ha recibido el premio al mejor proyecto europeo de la Comunidad Valenciana 2013 en la categoría de Innovación por el desarrollo de una malla biodegradable para productos agroalimentarios en el marco del proyecto ECOBIONET. Se trata de un galardón convocado por la Conselleria de Hacienda y Administración Pública que se ha entregado junto con otros dos premios a la formación y el medio ambiente en una ceremonia celebrada en el patio gótico de la Conselleria con motivo del Día de Europa.
Gracias a su participación en el proyecto ECOBIONET, AIMPLAS ha desarrollado con éxito una novedosa malla para envasar cítricos, patatas, cebollas o moluscos que a diferencia de las convencionales no es necesario separar de la basura orgánica para su reciclado. La nueva malla es biodegradable y compostable, por lo que debe ser depositada con el resto de residuos orgánicos generados tanto en el hogar como en las superficies comerciales. En condiciones de compostabilidad industrial, las mallas se convierten en abono para las plantas, en un tiempo inferior a seis meses, y se incorporan de nuevo al ciclo del cultivo de los productos que habían contenido.
Durante la entrega del premio, José Antonio Costa, director gerente de AIMPLAS, ha asegurado: “Para nosotros el mejor premio es que las empresas sean capaces de innovar compitiendo con sus homólogas a nivel europeo y global. Es necesario seguir apostando por la innovación a nivel regional, nacional y europeo y las empresas y demás agentes, debemos aprovechar todas las oportunidades que se nos presentan«.
Sobre el proyecto ECOBIONET, José Antonio Costa ha destacado cómo se ha logrado obtener “un valor añadido como la sostenibilidad a un precio competitivo”, ya que según ha asegurado la principal barrera de entrada en el mercado de los productos bio actualmente es el precio. «La participación en proyectos como Ecobionet ha significado un importante retorno no solo para AIMPLAS, que ha conseguido así mantenerse a la vanguardia europea de la I+D+i en el campo de los polímeros y los plásticos en general, sino sobre todo para las empresas con las que hemos colaborado, desarrollando productos innovadores que les han proporcionado una ventaja frente a sus competidores«.
Por su parte, el conseller de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues, ha asegurado que los proyectos premiados hoy en las categorías de Innovación, Medio Ambiente y Formación y Empleo “son proyectos representativos de lo que es Europa” y ha recordado que en el periodo 2014- 2020 la Unión Europea invertirá 960.000 millones de euros en proyectos como los premiados hoy.
El innovador envase biodegradable mantiene las mismas propiedades y el mismo aspecto que las mallas extruidas fabricadas con materiales convencionales, y su precio es tan solo unos céntimos superior por kilo de producto contenido.
En el proyecto ECOBIONET también han participado las españolas Ecoplas y Cristóbal Meseguer, la alemana Tecnaro y la compañía belga OWS, y ha contado con la financiación del Programa Marco para la Competitividad y la Innovación (CIP). Uno de los aspectos más destacables de la malla biodegradable es su coste, ya que a pesar de presentar un valor añadido tan importante su precio final solo aumentaría en unos céntimos por kilo de producto envasado.
Mismas características, más propiedades
La malla biodegradable desarrollada por AIMPLAS cumple con todos los requerimientos funcionales para envasar desde patatas, ajos y cebollas, hasta mariscos y moluscos, pasando por cítricos y verduras. Tanto es así, que se puede fabricar en todas las variantes presentes en el mercado: mallas extruidas orientadas (las que mantienen su forma original con el producto en su interior: para ajos y moluscos, por ejemplo), las mallas extruidas no orientadas (para cítricos, patatas y una gran variedad de productos hortofrutícolas) y estas mallas combinadas con film (diseñadas para poder ver el producto y que éste transpire, pero que evitan que los residuos o polvo caigan fuera del envase).