La entidad para el reciclaje de envases ligeros asegura que la organización ecologista, en su informe ‘Ecoembes Miente’, ofrece de forma intencionada información errónea o directamente falsa para generar desconfianza social y desincentivar la separación de residuos.
Tras la reciente publicación del informe ‘Ecoembes Miente’ por parte de Greenpeace, Ecoembes ha salido al paso para acusar a la organización ecologista de ofrecer «información errónea, intencionada y muy alejada de la realidad de nuestro país», con el único objetivo de «generar desconfianza social en la gestión del reciclaje de envases».
En un comunicado, el sistema de gestión de envases domésticos afirma que las acusaciones vertidas en el informe de Greenpeace generan un «riesgo de desincentivación» entre la ciudadanía del hábito de separar los residuos de envases para su reciclaje.
«Toda la actividad de Ecoembes está completamente regulada y sometida al control y certificación de la administración pública, de principio a fin y sin ninguna excepción», afirma la entidad, que recuerda que «esta misma autoridad pública tiene en su poder la capacidad de investigar y sancionar las malas praxis», algo que en los 23 año de existencia de Ecoembes «no ha ocurrido en ninguna ocasión».
El SCRAP de envases ligeros continúa diciendo que «muy al contrario de lo que apunta Greenpeace, durante todos estos años hemos introducido en toda la cadena de reciclaje aún más controles y protocolos de los legalmente requeridos por la ley que nos han permitido consolidar un modelo basado en la coordinación y la trazabilidad como señas de identidad». Y asegura que en diversas ocasiones Ecoembes ha ofrecido a Greenpeace la posibilidad de auditar las cifras de su actividad, analizar los datos y despejar dudas técnicas o metodológicas, «sin ninguna respuesta por su parte».
El comunicado de Ecoembes se acompaña de un documento en el que rebate las acusaciones de Greenpeace en cuestiones como la transparencia y la trazabilidad de los envases -acusando a la organización ecologista, por ejemplo, de generar confusión al comparar envases de plástico con envases ligeros-, los incendios en plantas de reciclaje -asegurando que es falso que se contabilice como reciclado ningún material quemado-, o la incineración -recordando que menos del 5% de los envases adheridos a Ecoembes se valorizan energéticamente en incineradoras-.