La conferencia de la asociación europea de gestores de residuos alerta de la crisis que padece el sector del reciclaje y reclama un mercado único circular.
La asociación europea de gestores de residuos FEAD organizó el pasado jueves su conferencia sobre «Prioridades de la economía circular», que reunió a las principales partes interesadas, responsables políticos y líderes de la industria para abordar el potencial y los retos del sector de la gestión de residuos de la UE. El evento fue una plataforma para debatir la próxima normativa europea de economía circular y la agenda más amplia de competitividad de la UE, con un fuerte enfoque en el fomento de un Mercado Único Circular Europeo y el fortalecimiento de la contribución del sector de los residuos a la economía circular.
Claudia Mensi, presidenta de FEAD, presentó las prioridades legislativas que el sector privado de gestión de residuos ha definido y pretende exigir a las instituciones europeas para este nuevo mandato. A continuación, Aurel Ciobanu-Dordea, director de Economía Circular de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, pronunció un discurso de apertura y una visión general sobre la próxima «Ley de Economía Circular», destacando las principales medidas que puede contener y la importancia de la «circularidad que crea oportunidades».
El primer panel de la jornada abordó las acciones necesarias para un Mercado Único Circular Europeo. El debate puso de relieve la necesidad de una aplicación práctica por encima de la adopción de reglamentos excesivos. La parte de preguntas y respuestas del panel se hizo eco de un mensaje alarmante de los líderes de la industria que expresaron la crisis del sector del reciclaje, expresando que «debemos reforzar la circularidad europea y salvaguardar nuestra industria del reciclaje».
Esta crisis coincide paradójicamente con la adopción de una ambiciosa legislación de apoyo a la economía circular, que incluye objetivos de contenido de reciclado. Sin embargo, los recicladores europeos buscan capacidades de almacenamiento y abastecimiento en lugar de ver cómo sus materiales se reincorporan a nuevos productos.
Aurel Ciobanu-Dordea declaró que «cada vez hay más conciencia del papel de la economía circular en la descarbonización y la seguridad de los recursos». Florian Flachenecker, Policy Officer de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, subrayó el déficit de inversión de 27.000 millones de euros para la economía circular, para lo que se necesitan inversiones tanto privadas como públicas.
El español Alejandro Dorado Nájera, comisario de Economía Circular del Ministerio para la Transición Ecológica, destacó que el comportamiento de los consumidores también es un problema y afirmó que «necesitamos hacer un esfuerzo en las campañas para que la gente conozca el efecto de sus comportamientos».
Sofie Bouteligier, responsable de Política Internacional de OVAM (Bélgica), recordó que la principal pregunta que hay que hacerse es: «¿Cómo podemos satisfacer las necesidades de la sociedad con menos materiales y cómo pueden ayudar a ello las materias primas secundarias?».
Monica Harting Pfeifer, directora de Asuntos Públicos y Proyectos de Plásticos de Remondis (Alemania), subrayó la urgencia de actuar: «Necesitamos circularidad en Europa, basada en residuos europeos reciclados en Europa, y no un mercado que tire de otros lugares. Ahora mismo, muchas empresas de reciclaje están cerrando, poniendo en peligro lo que tanto nos ha costado desarrollar. Si no ocurre nada en el próximo medio año, las capacidades de reciclaje construidas en los últimos 15 años caerán y hará falta otra década para reconstruirlas».
El segundo panel se centró en la necesidad de impulsar la competitividad del sector de gestión de residuos de la UE. Así, se hizo hincapié en la necesidad de un mercado justo y de colaboración entre el sector público y el privado para que la Unión Europea alcance sus objetivos climáticos y de competitividad.
Michael Karl Pieber, de la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea, y Frederik de Ridder, jurista del Órgano de Vigilancia de la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC), explicaron a los asistentes el papel y la experiencia de sus respectivas autoridades en la aplicación de las normas de competencia en el sector de la gestión de residuos.
Elisabetta Perrotta, directora de Assoambiente (Italia), y miembro de FEAD, subrayó que «las empresas privadas tienen en su ADN la posibilidad y el dinamismo para alcanzar un mercado del reciclaje más fuerte. Por eso no debemos asfixiarlas».
Gunnar Grini, director de Reciclaje de la Federación de Industrias Noruegas y miembro de la FEAD, señaló que en Noruega »existen fuertes interacciones entre el sector público y el privado, pero cuando se opera en mercados comerciales deben respetarse las normas de competencia».
La conferencia también contó con una perspicaz presentación que cuestionó la necesidad de cambiar las normas de mercado y competencia en el Derecho de la Unión Europea, a cargo de Jakub Pawelec, presidente del Comité de Cuestiones Jurídicas y de Mercado de FEAD, quien explicó que «la economía circular necesita empresas privadas para tener éxito, y las empresas privadas necesitan una competencia leal para sobrevivir».
Despues de muchoas años detras de la industria del reciclaje, siento deciros que la economia circular no funciona…
Es como «un mundo feliz» que se ha demostrado no funciona unicamente ciscunscrita a la UE.
Hay que dejar que las empresa recicladoras puedan ofrecer y vender sus prouctos a tercros paises que, ademas, requieren de los residuos que se generan en la UE para sus incipientes mercados de reciclaje plastico.
EU no puede absorver el residuo que se genera. Imposible y ya ha sido demostrado…
Lo unico que se esta consiguiendo con esa cabezoneria de los burocratas comisiarios europeos es que muchas empresas de mtamaño medio y pequeño tengan que cerrar sus plantas.
Vamos por el mal camino!!!!!