Un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente señala cómo los principios de la economía circular pueden mejorar los beneficios de la renovación de edificios, reduciendo significativamente el uso de materiales y las emisiones de CO2.
Los edificios consumen muchos recursos materiales y energía y, por lo tanto, desempeñan un papel importante en la política medioambiental y climática de Europa. Las emisiones integradas, que representan las emisiones liberadas por la extracción de recursos naturales y su procesamiento en materiales de construcción, representan casi una cuarta parte de las emisiones del ciclo de vida del parque de edificios actual de la UE.
Un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), titulado ‘Renovación de edificios: donde la economía circular y el clima se encuentran’, analiza los beneficios de utilizar los principios de la economía circular en la rehabilitación de edificios de Europa, lo que significa mantener los materiales y productos en uso el mayor tiempo posible y reutilizar o reciclar de manera eficiente todos los desechos.
Según el informe, evitar el uso de nuevos materiales de construcción tiene un gran potencial para la mitigación del cambio climático.
Las acciones de renovación circular más efectivas para ahorrar emisiones de CO2 y el uso de materiales incluyen extender la vida útil de los edificios existentes, por ejemplo, mediante reparaciones y remodelaciones en lugar de demolerlos, y usar los edificios de manera más eficiente, por ejemplo, haciendo que los espacios sean multifuncionales. Estas acciones reducirían la demanda de nueva construcción, que requiere muchos más materiales que las renovaciones.
Además, aplicar al parque de edificios de la UE las ambiciosas estrategias de rehabilitación circular, como el uso de materiales reciclados o diseñados para desmontarse, podrían reducir de forma acumulada cerca de 650 millones de toneladas de materiales y ahorrar cantidades sustanciales de CO2 de 2022 hasta 2050.