Alexandra Farbiarz Mas.
Comunicóloga, especializada en Biotecnología y Medio Ambiente.
TERRAQUI. Derecho Ambiental.
Estas son las conclusiones de un grupo de expertos que bajo el proyecto POLFREE de la UE realizan estudios con el fin de comprender que impide el desarrollo de la eficiencia de los recursos en Europa, así como propuestas para que la UE pueda avanzar en los objetivos que se proponga en esta materia.
El proyecto europeo POLFREE (acrónimo de Policy Opcions for a Resource-Efficient Economy) prevé la construcción de un marco teórico para el análisis de la eficiencia de los recursos, mediante la comparativa detallada de las tendencias y políticas a nivel de los Estados Miembros (EM), el análisis econométrico entre los distintos EM para modelizar las curvas sobre costes de reducción de los recursos de la UE y el análisis sobre las barreras que encuentran los negocios para poder ser eficientes en sus recursos; todo ello, para tratar de comprender la actual ineficiencia de los recursos.
Sus cuatro áreas de investigación son las siguientes:
- El porqué de la ineficiencia en la utilización de los recursos.
- Nuevos conceptos y paradigmas de las políticas de eficiencia de los recursos.
- Escenarios y modelización de políticas de implementación de eficiencia de los recursos.
- Apoyo, difusión y orientación para diseñar políticas.
POLFREE lo componen 8 organizaciones de prestigio europeo: el Wuppertal Institut, el International Centre for Integrated assessment and Sustainable development -ICIS- de la Universidad de Maastricht, The Netherlands Organisation for Applied Scientific Research, The Insitute of Economic Structures Research, The Sustainable Europe Research Institute -SERI-, el Potsdam Institute for Climate Impact Research, el International Synergies, y por último, el Institute for Sustainable Resources de la University College London.
En un resumen de las conclusiones de diferentes estudios realizados hasta ahora, POLFREE comparó los aumentos de la eficiencia de los recursos que tendría la UE en 2050 si persigue sus políticas bajo tres escenarios diferentes:
- Actuando la UE de manera unilateral.
- Actuando en la cooperación internacional.
- Actuando por medio de cambios impulsados por la sociedad.
El estudio concluyó que, en un escenario en que los negocios siguieran como hasta ahora, el mayor progreso de la UE se daría en caso de que la UE trabajara por su cuenta aplicando correctamente las políticas y legislación en eficiencia de los recursos y modificando el Régimen Comunitario de Comercio de Derechos de Emisión. Y se alcanzarían incluso mejores resultados que tratar de hacerlo bajo una coalición mundial que abordara los mismos asuntos.
Según los investigadores, tomando la iniciativa con las políticas de eficiencia de recursos, se reducirían las emisiones de carbono de la UE en un 76% en 2050 con respecto a 1990, mientras que las emisiones se reducirían en un 72% si la UE trabajara a través de una coalición internacional.
En el escenario en que la UE trabajara de forma independiente en la eficiencia de los recursos, el PIB de la UE aumentaría en un 12,4% y crearía 3,5 millones de empleos en 2050, mientras que en un escenario de “coalición global” su PIB ascendería al 8,2% y emplearía a 1,5 millones de trabajadores.
Por otro lado, la acción independiente reduciría el uso de la tierra agrícola per cápita de la UE en un 31% con respecto al 2000, mientras que las políticas en coalición internacional darían lugar a una disminución del 26%.
Sin embargo, los investigadores advirtieron que se requieren cambios en la política si la UE quiere afrontar con éxito la ineficacia de los recursos por sí sola.
Para ello señala que los subsidios otorgados a la industria bajo el régimen comunitario de comercio de derechos de emisión debe reducirse gradualmente hasta el 2050, por lo que el carbono tendría un precio ese año de 240 € por tonelada, muy por encima de su precio actual de 6 € y de los 12-14 € que tiene previsto que se alcance en 2020. Los investigadores añadieron que las industrias que no entren en el régimen comunitario de comercio de derechos de emisión deben ser gravadas a través de un impuesto de carbono que beneficie a las empresas menos contaminantes.
Pero el estudio advierte de que solo una robusta “combinación de políticas” supondría el progreso de la UE en eficiencia de los recursos. Por ejemplo, los investigadores aplaudieron el compromiso de la UE para el tratamiento de residuos como un recurso para el año 2020 –de acuerdo con la hoja de ruta para una Europa que utilice eficazmente los recursos que propone el nuevo paquete de economía circular actualmente en discusión–, pero apuntan que los retos serán difíciles de abordar teniendo en cuenta la débil aplicación actual de las leyes de residuos de la UE.
Si no se adoptan medidas para mejorar la eficiencia de los recursos, el estudio predice que para el año 2050, las emisiones de carbono se duplicarán en todo el mundo con respecto a 1990, mientras que los precios de los cultivos mundiales de alimentos y del uso del agua podría subir en un 157% y un 35% respectivamente en comparación con el año 2000.
A su vez, esto daría lugar a una caída del PIB de la UE, lo que se traduciría en una importante pérdida de empleos y a un importante endeudamiento público entre los Estados Miembros.
En el siguiente enlace están disponibles las conclusiones de los tres escenarios citados.