Así lo afirma el Informe Estadístico Anual en su actualización de 2014 de la Memoria de Sostenibilidad del sector papelero, presentado por Aspapel.
La gran capacidad recicladora de la industria papelera española le permite garantizar sobradamente el reciclaje de todo el papel y cartón que se recoge en España (recogemos para reciclar 4,3 millones de toneladas de papel usado y nuestras fábricas utilizan como materia prima 5,1 millones de toneladas de papel para reciclar (lo que equivale a 51 grandes estadios de fútbol llenos de papel y cartón), según datos de ASPAPEL.
Cerrar el ciclo del papel y el cartón reciclando en cercanía significa poner en valor el esfuerzo que la sociedad española ha desarrollado en los últimos años en la recuperación de sus residuos de papel y cartón. Significa que el empleo y el valor añadido, que supone el convertir el papel usado en papel nuevo y en nuevos productos papeleros, se genera allí donde se han hecho las inversiones y el esfuerzo ciudadano para la recogida del papel usado. Es además una apuesta por la competitividad de nuestra industria recicladora, una apuesta por la reindustrialización, por la economía real, como palanca de salida de la crisis.
Como consecuencia de la prolongada crisis económica, el consumo de papel ha encadenado varios años de descensos hasta situarse a niveles de 1998, con 6,1 millones de toneladas. Con un consumo de papel similar al de quince años atrás podría pensarse que el papel usado recogido para reciclar sufriría un descenso equivalente. Sin embargo, consumiendo la misma cantidad de papel y cartón, recogimos en 2013 un 60% más de papel usado para reciclar que en 1998.