Una investigación de la consultora Kearney revela que las compañías que incorporan la economía circular a sus modelos de negocio obtienen importantes ventajas económicas y de reputación.
Una investigación realizada por la consultora Kearney ha revelado que los líderes que adoptan iniciativas circulares en sus modelos de negocio están superando a sus rivales tradicionales.
La encuesta realizada entre 150 empresas en todo el mundo pone de manifiesto los beneficios de quienes se involucran con modelos de economía circular y las desventajas para quienes no lo hacen. El 34% de los encuestados se pueden definir como ‘líderes’ en el campo circular.
De manera significativa, este grupo ha reportado mejoras en su negocio desde que cambió a productos y modelos circulares, que incluyen un aumento de los ingresos del 32%, un aumento del 38% en el ahorro de costes, un incremento del 50% en la fidelidad de los clientes y un aumento del 70% en el reconocimiento de marca.
Los datos llegan en un momento crítico, cuando el mundo se enfrenta a una creciente escasez de recursos y un problema de desperdicio. Actualmente, cada año se procesan más de 100.000 millones de toneladas de materiales, de los que más del 91% se extraen de los recursos naturales.
Una economía circular es clave para revertir esta tendencia mediante la eliminación de residuos y emisiones. Funciona cerrando los ciclos de materiales, de modo que el valor de los productos, materiales y recursos se mantenga en la economía el mayor tiempo posible y se minimice la generación de residuos.
En promedio, las empresas siguen utilizando un 32% de fuentes vírgenes no renovables. Sin embargo, el futuro es esperanzador. El 40% de las empresas tienen la economía circular como un elemento clave en su agenda de sostenibilidad y sus beneficios derivados deberían influir más en considerar la adopción de este modelo.
Los beneficios no son solo ambientales
El informe destaca algunos ejemplos como el del gigante sueco del mueble, Ikea, un nombre familiar comprometido con la nueva economía. Actualmente produce el 80% de su mobiliario de acuerdo con los principios de diseño circular y está trabajando hacia un modelo comercial completamente circular para 2030.
También Desso, una marca líder en alfombras, ha hecho que su producto sea totalmente reciclable siempre que sus clientes quieran cambiarlo. Como resultado, ha reducido a la mitad su consumo de energía, al tiempo que ha aumentado su cuota de mercado de la UE del 15% al 23%.
Yelena Ageyeva-Furman, socia de Kearney, explica que “la economía circular es el siguiente paso en el movimiento necesario de la economía mundial hacia un futuro sostenible. El informe lo explica claramente: los beneficios de adoptar una estrategia circular no son exclusivamente ambientales”.
“De hecho -añade Ageyeva-Furman-, quienes implementan iniciativas circulares están obteniendo importantes ventajas económicas y de reputación. En la Cuarta Era Industrial, vale la pena ser sostenible y aquellos que persisten en una economía insostenible de ‘tomar-usar-tirar’ inevitablemente comenzarán a quedarse atrás”.