El premio se enmarca en la Estrategia catalana de ecodiseño, para incorporar criterios ambientales que logren productos más sostenibles, más seguros y menos tóxicos, con un consumo menor de recursos y de materias primas.
El consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Santi Vila, entregó la semana pasada los Premios Catalunya de Ecodiseño. Se trata de una evolución del Premio Diseño para el Reciclaje que la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC) convocaba desde el año 2001, con un alcance más amplio para integrar todos los aspectos que intervienen en la sostenibilidad de los productos, como el ahorro de recursos, el diseño de nuevos modelos de consumo o la optimización del fin de vida.
Estos nuevos premios reconocen productos, productos en desarrollo y estrategias de fomento de productos que estén diseñados para mejorar el comportamiento ambiental de los productos y servicios a lo largo de su ciclo de vida.
En las diferentes categorías, de entre 194 candidaturas, los galardonados fueron:
- Producto: Cool Downlight, presentado por Simon. Se trata de una gama de luces empotradas (downlights) con tecnología LED, que combina las mejores prestaciones lumínicas con un excelente rendimiento lm/W y un diseño compacto, elegante, eficiente y confortable.
Se ha valorado que tiene un excelente rendimiento lumínico y un máximo confort visual, integrando conceptos de economía circular como el alargamiento de la vida útil y la preparación para el desmontaje, en un producto que destaca por la simplicidad de sus formas y su diseño compacto.
- Producto en desarrollo: En este caso, el premio fue compartido.
Por un lado la Silla Biennale, presentado por Figueras International Seating, con colaboración de Josep Ferrando Bramona. Se trata de una silla muy atractiva, icónica y poética, de formas simples, monomaterial, fabricada íntegramente con madera certificada de origen controlado, modular, reciclable, de diseño fractal con geometrías aparentemente simples conseguidas gracias a un gran esfuerzo de diseño con herramientas avanzadas.
Por otro lado, la Antivolabossa, presentado por Urbaser, Estudio Salva Fàbregas y Red Ambiental. Es un elemento para evitar que las bolsas de basura de las papeleras vuelen y vacíen su contenido en la vía pública. Evita el desperdicio de miles de bolsas de basura, así como la suciedad de la vía pública, y está elaborado a partir de un trozo de goma proveniente del mantenimiento de los contenedores de recogida selectiva.
Aporta una solución a un problema especialmente relevante en el Mediterráneo como es la acumulación de basura en el mar (marine litter), con una idea ingeniosa, aparentemente simple, pero que esconde un elaborado y riguroso esfuerzo de investigación y análisis, y que además utiliza como materia prima un residuo propio del sector.
- Estrategia: Kigali Chair Project, presentado por Clara Romero y José Mora. Una iniciativa que se llevó a cabo en Ruanda y que consiste en organizar talleres en los que se muestra cómo fabricar una silla de ruedas a partir de los recursos disponibles localmente, con un sistema de construcción simple y adaptable a las diferentes necesidades de los usuarios.
Se valoró su sensibilización hacia el ecodiseño con la reutilización de elementos comunes disponibles localmente y procesos de fabricación sencillos, por el gran valor social añadido de la propuesta y por ser fácilmente replicable en países en desarrollo.
- Diseño joven: Invento-Diseño de un miniaerogenerador, presentado por Andrea Artero, Albert Bercero y Joel Plana, de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Vilanova y la Geltrú (UPC). Miniaerogenerador de uso doméstico consistente en una turbina de energía minieólica para colocar en las fachadas de casas o edificios. Incorpora un módulo basado en geometrías aerodinámicas.
- Diseño euro-mediterráneo: Pep Lemon, presentado por Lemon Factory, con la colaboración de la Fundación Amadip.Esment, Agroilla, La Paduana y Comercial Bordoy, de Mallorca. Iniciativa para aprovechar los cítricos de la isla de Mallorca y convertirlos en una bebida de refresco natural, local y con compromiso social.
Este producto da respuesta a un problema ambiental de máxima actualidad y prioridad, el derroche alimentario, y aprovecha un producto que no tenía valor en el mercado;además se valoró el compromiso social de la estrategia, que crea sinergias entre entidades locales de las islas, su replicabilidad en la zona mediterránea y su buena presentación y comunicación.
Apuesta por el ecodiseño
La promoción del diseño para el reciclaje en Catalunya nació ya hace años de la necesidad de dar salida a los materiales reciclados que se obtienen a partir de la recogida selectiva de los residuos municipales, industriales y de la construcción. Por otra parte, para promover que los nuevos productos que se fabrican se diseñen pensando en un futuro reciclaje y para que generen la mínima cantidad de residuos.
El Gobierno de la Generalitat elaboró un Programa interdepartamental de ecodiseño. La finalidad fue la de una reducción del consumo de materias primas, del consumo de energía, de la generación de residuos y de emisiones, y de costes asociados, estableciendo un entorno adecuado y favorable para dar un valor añadido y responsable a los productos y servicios producidos y comercializados en Cataluña. Una consecuencia de este objetivo es la de lograr una mayor ecoeficiencia, una mayor competitividad en el mundo empresarial y una mayor responsabilidad social y ambiental.
Fruto de todos estos aspectos de trabajo, el pasado mes de junio el Gobierno regional aprobó la Estrategia catalana de ecodiseño para una economía circular y ecoinnovadora (ECODIScat), una herramienta de ecoinnovación que tiene como objetivo promover la economía circular, a través del reciclaje, y una mayor sostenibilidad a la hora de producir y consumir productos. Se trata de un tipo de diseño que incorpora criterios ambientales para lograr productos más sostenibles, más seguros y menos tóxicos, con un consumo menor de recursos y de materias primas.