El Ayuntamiento de la localidad valenciana ha elegido el centro formativo para arrancar esta iniciativa que convertirá a la escuela de la corporación en la primera del municipio en cerrar el ciclo de la materia orgánica.
La Escuela de Viticultura y Enología de la Diputación de Valencia ha sido elegida por el Ayuntamiento de Requena para iniciar un proyecto piloto de recogida de biorresiduos. Una iniciativa que convertirá al centro formativo de la corporación provincial en el primero del municipio en el que se cierra el ciclo de la materia orgánica.
A partir de ahora, los alumnos empezarán a separar los residuos procedentes del comedor. Para facilitarles el trabajo, el consistorio ha hecho entrega a la escuela de un compostador dinámico, así como del material auxiliar necesario para utilizarlo. El compost resultante de estos biorresiduos se podrá emplear en los viveros y en la producción de plantas. “La idea es que en lo que queda de curso vayamos familiarizándonos con el proceso y lo implantemos definitivamente a partir de septiembre”, explica Jorge Montes, profesor de la escuela, quien pone el foco en “lo interesante que es esta herramienta desde el punto de vista docente”.
El plan municipal prevé extender esta iniciativa al resto de escuelas de Requena. “La idea es que los alumnos se formen, adquieran experiencia y pasen a ser asesores cuando se implante en otros centros”, señala el alcalde de Requena, Mario Sánchez, quien subraya que la recogida de la materia orgánica “es un reto para los Ayuntamientos”. “Estamos convencidos de que esta experiencia en la Escuela de Viticultura y Enología de Requena será todo un éxito”, apunta.