Los resultados del estudio de ARPAL para el año 2016 indican que se ha reciclado el 45,5% de todos los envases de aluminio y se ha valorizado el 48,3%.
La cantidad de envases de aluminio recuperados en el año 2016 ha crecido considerablemente en España. Además de una mayor concienciación de la población, la conversión de dos plantas de latas de bebidas de acero a aluminio ha supuesto un incremento de estos envases en el mercado. Los resultados del estudio del año 2016 indican que se ha reciclado el 45,5% de todos los envases de este material y se ha valorizado el 48,3%
La Asociación ARPAL realiza cada año un estudio para conocer las toneladas de envases de aluminio recuperadas por distintos canales. Los datos de este estudio complementan los ofrecidos por Ecoembes (los envases recuperados a través del contenedor amarillo, de plantas de selección y compostaje y de recogidas complementarias).
El estudio que realiza ARPAL entre los recuperadores tradicionales permite contabilizar la cantidad de envases de aluminio que estos profesionales reciben en sus plantas, procesan y envían a fundición para su reciclaje.
Esta investigación se lleva a cabo desde el año 2001 y se basa en conocer “puerta a puerta” la cantidad de material recuperado por las plantas de los recuperadores tradicionales. El estudio cuenta con la colaboración de la Federación Española de la Recuperación (FER). El estudio contabiliza también las toneladas valorizadas energéticamente. Todo este proceso permite ofrecer un dato contrastado y fiable del total de toneladas de envases de aluminio recuperadas y valorizadas en España.
Todo el aluminio que se recupera se recicla ya que este metal es el material de envase con más valor en el mercado. Además, constituye una excelente materia prima para volver a fabricar productos de aluminio ya que en el proceso de reciclado no cambian sus propiedades. De hecho, el 75% de todo el aluminio que se ha fabricado desde hace 100 años se encuentra actualmente en uso, en forma de diversos productos, gracias al reciclado.
Otra ventaja es el ahorro de energía, ya que fabricar nuevos productos con aluminio reciclado permite un ahorro del 95% de la energía necesaria para producirlo a partir del mineral bauxita.