El informe de Recovo ‘Moda Circular en España’ analiza los principales avances -y carencias- de la industria de la moda hacia un modelo más circular.
Más de 45 empresas han participado en la primera edición de Moda Circular en España, un estudio impulsado por la plataforma para la circularidad del textil Recovo que busca medir el pulso de la industria española de la moda circular.
Según datos del informe, la adopción de nuevos materiales se erige como el eje principal de la estrategia de impacto de las empresas españolas de moda que trabajan actualmente en busca de un modelo más circular. Así, alrededor del 83% de la industria de la moda de España apuesta por la utilización de materiales sostenibles, reciclados, reusados e innovadores. Le siguen estrategias como la educación al consumidor sobre el consumo responsable (45,7%) o la aplicación de iniciativas de economía circular (45,7%).
Aún así, el Informe no duda en señalar que la moda tiene un largo camino por recorrer en la medición de su impacto, ya que sólo dos de cada diez empresas que trabajan la circularidad mide actualmente su huella de carbono. Por lo que, ocho de cada diez empresas todavía no lo hacen y deberán hacerlo en los próximos años dado que legislación que está impulsando la Unión Europea ya está en cuenta atrás y solo el 33% de empresas españolas que trabajan la moda circular se ha centrado en 2023 en cambiar sus operaciones con el fin de dar cumplimiento a la legislación medioambiental.
Sin embargo, en el ámbito de los residuos, las empresas españolas están mucho más avanzadas: más de un 80% de ellas ya los está gestionando actualmente.
Objetivos para impulsar la circularidad
Diseñar prendas pensando en que sean durables, reciclables o que generen un menor volumen de residuos (81%). Estos son los tres objetivos principales del diseño circular o ecodiseño, que se presentó como el principal objetivo que persiguen las empresas españolas que ya trabajan la moda circular en 2023. Los sistemas de producción close the loop (sistema completamente circular) (29,5%) o un mayor uso de materiales sostenibles (52,3%) son otros de ellos. Aunque el estudio también pone la mira en el futuro y señala que aumentar la transparencia publicando de forma periódica memorias de sostenibilidad será clave para su desarrollo.
El residuo en la moda circular de España
El estudio habla de tres tipos de residuos en el sector de la moda: residuo posindustrial, residuo preconsumo y residuo posconsumo.
Comprar de más, desechos de fabricación o errores de producción son algunas de las razones de la generación de residuos posindustriales, es decir, aquellos que emanan de la actividad industrial. Entre las empresas españolas que ya trabajan la moda circular, un 71% señalan que generan hasta un 25% de exceso de tejidos tras completar una colección. Sin embargo, todavía son pocas las que son conscientes del impacto de estos residuos y los miden; sólo lo hacen un 15% de ellas. ¿Y qué hacen las compañías con los remanentes de tejidos? El informe revela que un 56% de las compañías los recicla, mientras que un 43% todavía no.
Tras la producción, otro tipo de residuo puede generarse de forma previa a su venta, lo que se conoce como residuo preconsumo. En esta categoría se incluyen mayoritariamente productos que no llegan a ponerse a disposición del cliente por incluir taras, es decir, residuos que genera la industria de la moda en forma de artículos terminados que no llegan a ver la luz en el mercado. Más de la mitad de las empresas españolas encuestadas sostienen que hasta una de cada cuatro prendas que producen no llegan a venderse por contener errores. Solamente para cinco de cada cien empresas españolas que trabajan la moda circular el porcentaje de prendas que termina descartado y no llega al mercado se sitúa entre el 25% y el 50% de la producción total.
Finalmente, está el residuo posconsumo, para el que la industria hace frente con algunas iniciativas como los sistemas de recogida de prendas en tienda, plataformas de segunda mano, servicios de reparación o alquiler de prendas. A pesar de todas estas iniciativas, cada año se generan en España 451.000 toneladas de residuos textiles posconsumo, de los cuales se recogen de manera separada y efectiva 96.160 toneladas, según datos de la Comisión Europea. Así, pese a ser el cuarto país que más residuos textiles posconsumo genera, España está muy por debajo de la media europea en el porcentaje de recogida, con sólo un 21% del total.
A la espera de la normativa de 2025, cada vez son más las empresas que han establecido iniciativas de diferentes tipos para gestionar las prendas tras su uso. Cerca de un 26% de ellas han desarrollado proyectos como la instalación de contenedores en sus propias tiendas o han implementado plataformas de segunda mano, convirtiéndose en uno de los segmentos más en auge en la industria de la moda.
Retos para el desarrollo de modelos circulares
Cuestiones económicas, de pedidos mínimos, de escalabilidad, de trabajo con los proveedores o de comunicación con el cliente son los principales retos que afronta la transición circular en nuestro país. A los elementos anteriores se suman dos que se presentan como piezas clave para la circularidad: por un lado, el necesario conocimiento y adaptación a la legislación que está por venir y, por otro, la colaboración entre todos los eslabones y actores de la cadena de valor de la industria de la moda con el fin de que el modelo evolucione hacia uno que mejore su impacto en el medioambiente y las personas.