La Comisión Europea ha publicado un informe que servirá de base al documento guía que debe orientar en la clasificación de los residuos peligrosos.
La legislación en materia de clasificación de residuos –la Lista Europea de Residuos y las características de peligrosidad– se han revisado en 2015, por lo que la caracterización de los residuos se tiene que realizar según los nuevos métodos previstos. Esta nueva caracterización es obligación del productor del residuo y supone modificaciones en su etiquetado.
Por ello, la Comisión Europea ha encargado un estudio que servirá de base para un documento guía de la propia Comisión, y que tendrá por objeto orientar en la clasificación de residuos peligrosos.
Bajo el título “Study to develop a guidance document on the definition and classification of hazardous waste”, en la redacción de este informe se ha revisado la legislación existente, y se ha tenido en cuenta la bibliografía, investigación de campo y contribuciones de expertos.
El documento se estructura en tres capítulos y cuatro anexos. En los dos primeros capítulos se detalla el marco legislativo en materia de residuos y su clasificación. El capítulo 3 incluye una guía general de clasificación, y en los anexos se explica la forma de clasificar los residuos mediante la Lista Europea de Residuos y se incluyen ejemplos para algunos tipos de residuos –envases, RAEE y VFU– y para sustancias contenidas en los residuos –hidrocarburos, PAH, y BTEX, sustancias que agotan la capa de ozono, amianto, cal (CaO, Ca(OH)2), asfalto, metales y aleaciones, peróxidos orgánicos, caucho, plástico y compuestos orgánicos persistentes–. También se aportan fuentes de información de las sustancias peligrosas (REACH y hojas de seguridad), determinación de las características de peligrosidad y muestro y análisis químico de los residuos.
La Lista Europea de Residuos contiene entradas de residuos no peligrosos, de residuos peligrosos y entradas “espejo”, en las que un residuo, dependiendo de sus características, puede tener la consideración de peligroso. Es en este último tipo de entradas “espejo” en las que se pueden plantear más dudas, y en las que el estudio tiene mayor interés por el procedimiento de clasificación propuesto.
La clasificación de los residuos tiene importantes consecuencias en su posterior tratamiento y en las medidas de seguridad que los gestores debe tomar. Que la clasificación se realice de forma rigurosa y objetiva es uno de los aspectos en los que nuestro país debe mejorar para que cada residuo reciba el tratamiento adecuado a sus características; de ahí el gran interés de este trabajo de la Comisión Europea.
Fuente:
Asegre