La organización europea de recicladores asegura que con la actual propuesta, más de 50 millones de neumáticos fuera de uso se acumularán en los vertederos o se exportarán para su incineración.
La Confederación Europea de Industrias del Reciclaje (EuRIC) ha mostrado su más absoluto rechazo a una propuesta de la UE que prohibirá indirectamente los materiales procedentes de los neumáticos fuera de uso como parte de su esfuerzo por erradicar los microplásticos.
Cada año se procesan alrededor de 150 millones de neumáticos para su reciclaje, lo que supone un neumático por cada tres ciudadanos de la UE. Este caucho procedente de los neumáticos reciclados tiene una amplia gama de beneficios cotidianos que no siempre son obvios, como los materiales esenciales para los campos de fútbol artificiales, los parques infantiles y el relleno de baches.
«Con la propuesta actual, más de 50 millones de neumáticos no reciclados pueden acumularse o corren el riesgo de ser exportados fuera de la UE para su incineración, donde las normas medioambientales son menos estrictas. Un enfoque de talla única no es la política climática inteligente que esperamos de la UE», afirma Emmanuel Katrakis, secretario general de EuRIC.
En combinación con las estrictas medidas de gestión de riesgos para limitar la liberación de microplásticos practicadas por organizaciones como la FIFA, EuRIC recuerda que ya existe en la UE una economía circular para los neumáticos que cumple con REACH. Esto evita que unas 371.000 toneladas de emisiones de CO2 dañen un clima ya frágil. Esto equivale a la cantidad de CO2 que absorben los bosques de 14 veces el tamaño de Bruselas.
Según la organización de recicladores, esta medida también pone en riesgo casi 70 millones de euros de volumen de negocio para la economía europea. Por lo tanto, los recicladores europeos instan firmemente a la UE a que reconsidere el valor de este material de reciclaje y lo deje fuera del ámbito de la definición de microplástico propuesta.