EuRIC defiende el uso en campos de césped artificial del granulado procedente de neumáticos reciclados

La Confederación Europea de Industrias del Reciclaje advierte que si se adopta una prohibición del relleno granular, más de 500.000 toneladas de neumáticos al final de su vida útil pueden acabar incinerados cada año, o almacenados y depositados ilegalmente en vertederos.

La Confederación Europea de Industrias del Reciclaje (EuRIC), que representa los intereses colectivos de la industria europea de reciclaje de neumáticos fuera de uso (NFU), ha defendido ante la Comisión Europea el uso de granulado procedente de neumáticos reciclados como material de relleno.

Tras la publicación de los dictámenes de la ECHA sobre materiales de relleno, ahora le corresponde a la Comisión tomar una decisión sobre las medidas a seguir en relación con esta aplicación.

EuRIC advierte sobre los impactos negativos que algunas de las opciones contempladas, incluida la prohibición total, pueden tener sobre el medio ambiente y sobre los objetivos de acelerar la transición hacia una economía más circular.

La organización ha planteado su preocupación por el futuro de las 527.000 toneladas de neumáticos fuera de uso que se reciclan anualmente para convertirlos en césped artificial, advirtiendo sobre los riesgos de que sean mal gestionados y causen un enorme impacto medioambiental en caso de que se proponga la prohibición de estos materiales de relleno.

EuRIC Mechanical Tyre Recycling Branch (EuRIC MTR) ha expresado su apoyo a los objetivos de la Comisión Europea, y confía en que la prevención de una mala gestión de los residuos de neumáticos estará en el punto central de su decisión al tomar en consideración las diferentes opciones propuestas por la ECHA. Especialmente, sabiendo que no hay alternativas para una gestión ambientalmente correcta de los aproximadamente 50 millones de unidades de neumáticos que se reciclan anualmente y se convierten en material de relleno.

Sin embargo, reconoce que el reciclaje de neumáticos para su uso como material de relleno de césped artificial puede y debe ir de la mano de la reducción de las emisiones de microplásticos a través de medidas de gestión de riesgos estandarizadas como las descritas en el informe técnico CEN/TR 17519 del Comité Europeo de Normalización (CEN).

«El reciclaje mecánico de neumáticos de última generación apoya totalmente el Pacto Verde europeo y el nuevo Plan de Acción de la Economía Circular», subrayó Poul Steen Rasmussen, presidente de la rama MTR de EuRIC y director general del Grupo Genan. «El procesamiento de los NFU para convertirlos en caucho no sólo es la opción más eficiente en cuanto a recursos, sino también la más eficiente en cuanto al clima, ya que por cada tonelada de neumáticos reciclada como relleno para campos de césped artificial, el clima se ahorra 700 kg de CO2 en comparación con la coincineración», añadió.

Respecto a los esfuerzos para minimizar la liberación de microplásticos en el medio ambiente, Rasmussen animó a la Comisión Europea a «introducir medidas de gestión de riesgos para evitar la liberación involuntaria de microplásticos en el medio ambiente, una de las opciones evaluadas por la ECHA.»

EuRIC ha expresado su apoyo al sistema de reciclaje de neumáticos fuera de uso, que define como «una cadena de valor circular madura y que funciona bien, que contribuye directamente a la recuperación de miles de toneladas de materias primas críticas como el caucho, y también de acero y fibras textiles, ahorrando cantidades sustanciales de energía y agua, y evitando las emisiones de gases de efecto invernadero. Junto con el ahorro de millones de euros en importaciones de materias primas y la generación de miles de puestos de trabajo».