Esta alianza, en la que participan algunas de las más importantes empresas del País Vasco, quiere contribuir a la transformación del tejido industrial para que Euskadi pueda afrontar con solvencia los retos ambientales de los próximos años.
La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, suscribió el pasado miércoles, junto a 14 empresas vascas y las sociedades públicas Ihobe y SPRI, una alianza de colaboración público-privada en ecodiseño y economía circular, en lo que se denomina Basque Ecodesign Center. El acuerdo representa una importante movilización del sector industrial vasco hacia esquemas más sostenibles en línea con la estrategia marcada por el Pacto Verde Europeo y el Basque Green Deal en Euskadi por la dimensión económica de sus integrantes. Las empresas del Basque Ecodesign Center representan una facturación anual de 59.000 millones de euros, dan empleo a 148.000 personas y cuentan con 103.000 entidades proveedoras.
La alianza está integrada por ArcelorMittal Sestao, Batz Group, CAF, CIE Automotive, EDP España, Eroski, Grupo Campezo, Iberdrola, Kutxabank, Ormazabal Velatia, Orona S.Coop., Siemens-Gamesa Renewable Energy, Vicinay Sestao, Viuda de Sainz, las sociedades públicas de medio ambiente y promoción industrial Ihobe y SPRI, y el propio Gobierno vasco.
“Esta alianza quiere contribuir a la transformación del tejido industrial vasco para que Euskadi pueda afrontar con solvencia los retos ambientales de los próximos años” aseguró la consejera Tapia.
Además, se creará un think tank en el que estas empresas y el Gobierno Vasco realizarán anualmente una reflexión estratégica sobre los retos en economía circular para el tejido empresarial vasco. Como resultado de esta reflexión se generarán recomendaciones para la mejora de la política ambiental del País Vasco y se adoptarán compromisos por parte de las empresas al más alto nivel.
“La consecución de una economía climáticamente neutra y circular en Euskadi exige la plena movilización de la industria. Se necesitan veinticinco años, una generación, para transformar un sector industrial y todas las cadenas de valor. Si queremos estar preparados en 2050, deben tomarse decisiones y adoptarse medidas en los próximos cinco años”, precisó la consejera Tapia.
Herramienta para medir la huella ambiental de las empresas
Coincidiendo con la firma de este acuerdo, el Basque Ecodesign Center presentó una guía metodológica y una herramienta para que las organizaciones puedan calcular su huella ambiental corporativa.
La elaboración de esta guía es una clara apuesta por situar el cálculo de la huella ambiental en el eje de la transformación del tejido empresarial vasco.
“Su aplicación -indicó Arantxa Tapia- permitirá a las empresas medir y comunicar los impactos ambientales a lo largo de la cadena de valor; establecer objetivos corporativos a medio y largo plazo; identificar los puntos críticos de sus procesos desde el punto de vista ambiental para después reducirlos mediante la aplicación de estrategias de economía circular; e incorporar criterios de compra verde, tanto en el sector público como privado, para poder hacer elecciones con menor impacto ambiental”.