El aumento de las ventas de productos electrónicos durante estas fechas conlleva también la generación de grandes cantidades de residuos. Es fundamental depositar los viejos aparatos en los correspondientes puntos de recogida para su recuperación y reciclaje.
Los teléfonos inteligentes o smartphones volverán a ser un año más el objeto de deseo de los españoles en Navidad y en la campaña de rebajas. Además, a la lista de preferencias se suman videoconsolas, smart TV, tabletas, pulseras de actividad, wearables, ordenadores, juguetes…, y así hasta un largo etcétera de aparatos eléctricos y electrónicos que al sustituir a los ya existentes en el hogar generan una plusmarca de residuos en estas fechas.
Por eso, la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para realizar un consumo responsable en la campaña de Navidad y para que gestione correctamente los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), bien utilizando los puntos limpios municipales, los puntos de venta –obligados a recoger el viejo aparato al adquirir uno nuevo de similares características– o la extensa red capilar de gestores autorizados para su tratamiento.
En 2015, los fabricantes pusieron en el mercado más de 68.748 toneladas de aparatos de informática y de telecomunicaciones, según el Registro Nacional de Productores de Aparatos Eléctricos y Electrónicos del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
La concienciación ciudadana es vital para evitar que los valiosos materiales de los RAEE como cobre, platino, plata, oro y paladio acaben en vertederos o en las campas ilegales de gestores no autorizados, advierte FER.
Según datos de la Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU., por cada millón de teléfonos móviles reciclados, que en peso son unas 70 toneladas, se pueden recuperar 16 toneladas de cobre, 350 kilos de plata, 34 kilos de oro y 15 kilos de paladio.
OBJETIVOS DE RECICLAJE
Los últimos datos sobre recogida de RAEE en España remitidos por Eurostat son de 2013 y alcanzaron las 209.505 toneladas. Es decir, cerca de 4,5 kilos por habitante al año. Además, a partir de 2017 se tienen que cumplir unos objetivos de preparación para la reutilización marcado por el Real Decreto 110/2015 y que son:
- El 2% de los grandes aparatos recogidos ese año (se entiende por gran aparato los de dimensiones superiores a 50 cm, con exclusión de los aparatos de frío, monitores y pantallas).
- El 3% de aparatos de informática y telecomunicaciones recogidos ese año.
España ha sido el primer país europeo que se ha impuesto objetivos legales de reutilización, siguiendo así el mandato recogido en la jerarquía europea de residuos, que prioriza la reutilización frente al reciclaje.
Los porcentajes de reutilización subirán un punto de cara a 2018, un pequeño porcentaje de toda la tecnología que se fabrica, pero que sirve para posicionar a nuestro país como un referente en el reacondicionamiento de productos tecnológicos para el resto de Europa.
GESTORES AUTORIZADOS DE RAEE
Por otro lado, el objetivo de recogida de RAEE que marca la legislación para el año 2016 es del 45% de la media en peso de aparatos puestos en el mercado durante los años 2013, 2014 y 2015, lo que supone 253.507 toneladas de residuos electrónicos. Por tanto, habrá que aumentar la recogida de RAEE casi en un 20% sobre 2013.
Aquí, la labor que aportan los gestores autorizados de RAEE es esencial para alcanzar las ratios de recogida que marca Bruselas. Es un sector clave para la economía circular, al fomentar un mercado de materias primas secundarias alternativo que cumpla con el objetivo de cerrar el ciclo de vida de cada producto, reduciendo a su vez las emisiones de CO2 a la atmósfera.
El otro pilar para cumplir con este ambicioso reto y situar a España en una posición óptima para afrontar el desafío del nuevo modelo económico es la concienciación y participación ciudadana.
Desde FER recuerdan que en estas fechas es fundamental que los consumidores conozcan las posibilidades existentes para reciclar sus viejos aparatos:
- Si no tiene intención de comprar un nuevo aparato, puede depositarlo en el punto limpio más cercano o en la red capilar de gestores autorizados de residuos electrónicos.
- Si compra un nuevo aparato, el vendedor debe aceptar sin coste alguno el antiguo. Además, es obligatorio que los grandes distribuidores recojan los RAEE cuya dimensión exterior no supere los 25 cm –como es el caso, por ejemplo, de los teléfonos móviles– de forma gratuita y sin la condición de que el usuario compre un aparato equivalente.
Aunque el consumo responsable en Navidad –y durante el resto del año–será siempre la mejor opción para el desarrollo sostenible.