El Giro de Italia presenta en el #wasteinprogress su modelo de gestión de residuos con el que consigue el 89% de recogida selectiva

La ciudad de Taipei también ha presentado en el Fórum #wasteinprogress su sistema de limpieza de cinco días a la semana para recoger un residuo diferente cada día.

El Giro de Italia ha implementado un modelo de gestión de residuos con el que consigue el 89% de recogida selectiva, según ha indicado el Presidente y Director Técnico de Proyectos Estratégicos de ERICA, Luigi Bosio. El proyecto fue presentado ayer en el #wasteinprogress – Fórum Internacional de Residuos, que tiene lugar desde el pasado miércoles y hasta hoy, viernes, en la Fira de Girona. El italiano detalló el proyecto “Ride Green”, que con un presupuesto de 100.000 euros pretende reducir el impacto medioambiental generado durante la competición.

Para ayudar a los ciclistas, que acostumbran a quitarse de encima todo el peso que pueden en los últimos metros de la etapa para conseguir ganar velocidad en el último sprint, los organizadores han señalizado una zona donde pueden tirar todos los residuos antes de llegar a la meta. Entre las últimas acciones impulsadas destaca la recogida de tejidos de los carteles que cubren las vallas de la meta, las reconvierten en bolsas ecológicas y se utilizan en la presentación oficial de la prueba.

En los diferentes pueblos por donde pasa la competición ciclista, los participantes pueden encontrar puntos de recogida con diferentes contenedores, divididos entre los que son para la materia orgánica y los que no se pueden separar. Estos contenedores están custodiados por representantes de los municipios y por voluntarios que se encargan de informar a los ciudadanos de donde tienen que depositar cada residuo.

El modelo de Taipei

El modelo de gestión de residuos de la ciudad de Taipei, en Taiwan, ha sido otro de los proyectos presentados en el Fórum. Kuo Ming, la ingeniera de Sinotech Engineering Services, fue la encargada de explicar como una ciudad de más de 2,5 millones de habitantes ha conseguido unos niveles de recogida selectiva del 67%. Taipei divide los residuos en dos tipos, los domésticos y los industriales. Para recoger los primeros, el gobierno de la ciudad ha creado un equipo de limpieza que se pone en marcha cinco días a la semana. Cada día los vehículos hacen una ruta determinada para recoger un tipo concreto de residuos y son los ciudadanos los que se acercan al vehículo para depositar su basura. Ahora el gobierno pone un calendario a disposición de los residentes para que conozcan qué tipo de resto deben entregar en función del día, avisados por el sonido de una melodía. Además, para incentivar a que la gente se sume a la recogida selectiva, las bolsas que son reciclables no se pagan, mientras que las normales sí.

En el caso de los residuos industriales, el sistema funciona a través de empresas de recogida privada. Son los mismos comercios los que tienen que contratar estas empresas, que se encargan de dividir los residuos entre reciclables y no reciclables. Después, estos venden los primeros en plantas de reciclaje mientras que los segundos se envían a las incineradoras, donde por cada tonelada pagan 58 euros.

Sant Llorenç des Cardassar (Mallorca)

El tercer proyecto que se ha presentado en la Fira ha sido el de Sant Llorenç des Cardassar, en Mallorca. El asesor técnico de Medio Ambiente del Ayuntamiento de la localidad, Gaspar Fuster, explicó como el pueblo, que cuenta con más de 25.000 plazas hoteleras, y donde en verano los residuos se multiplican por cinco, han conseguido un 56% de recogida selectiva. El municipio ha informatizado el servicio de recogida, de manera que pueden saber el peso de los residuos que recogen los camiones y controlar, a través de un GPS, cuales son los puntos donde se generan más residuos. Después de analizar los datos, el municipio ha optado por trabajar con el sistema puerta a puerta en las viviendas de la población interior y en el área del litoral residencial mantener el modelo clásico, es decir, con contenedores en determinados puntos de la zona.

Pero la gran apuesta la han dedicado a la zona turística y hotelera, que ocupa el 90% de su litoral. Es este sector del municipio implementaron un modelo basado en la bonificación de la tasa de basura. De esta forma el Ayuntamiento devuelve el dinero en función del nivel de reciclaje de los hoteles. También se elaboran ránquings para comprobar qué hoteles son los que más reciclan, lo que les incentiva a realizar unas buenas prácticas. El resultado es que algunos hoteles han conseguido unos niveles de recogida selectiva superiores al 70%, algunos superando el 80%.

Proyectos innovadores

También en el espacio Fórum Innova se han presentado proyectos originales, entre los cuales el de las Cápsulas Novell: materiales compostables para un consumo responsable, a cargo de Cafès Novell; la recogida selectiva móvil en el centro histórico de Palma, presentado por EMAYA; el proyecto Zero Waste y el Turismo: retos para una relación necesarias, por Zero Waste, y por último el impulso de la economía social y circular: la gestión sostenible de residuos turísticos y la creación de puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión social, presentado por la Dirección General de Educación Ambiental, Calidad Ambiental y Residuos de la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Govern de las Islas Baleares. Además, el espacio Workshop también ha permitido poner en común ideas en torno a dos temáticas: los modelos de recogida en segundas residencias y la recogida selectiva en el sector hotelero.

El Fórum cerrará la segunda edición hoy en una jornada en la que participará el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Tortoli, en la isla de Cerdeña, Walter Cattani, junto con el director comercial de Formula Ambiente, Matteo Brighi, que presentarán el proyecto de gestión de residuos de esta población del litoral sardo. El proyecto de recogida selectiva del festival Oktoberfest de Múnich, de la mano de la coordinadora de Economía Sostenible del Departamento de Trabajo y Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Múnich, Ursula Triebswetter, será la última ponencia internacional del #wastinprogress de este año.