La instalación cuenta con sendas líneas para el tratamiento mecánico-biológico de la fracción resto y el compostaje de la materia orgánica recogida selectivamente.
El consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Josep Rull, inauguró este sábado el centro de tratamiento de residuos (CTR) municipales de Pedret i Marzà (Alt Empordà). Esta es una instalación estratégica para la comarca que permitirá tratar la fracción resto –la que no se recoge de forma selectiva– y que hasta ahora iba directamente al depósito controlado, y la fracción orgánica (FORM), una vez que esté implantada en toda la comarca la recogida selectiva.
De este modo, se reducirá la cantidad de residuos destinados al vertedero y mejorarán las condiciones de la disposición. Bajo el principio del aprovechamiento de los recursos, el CTR permitirá revalorizar todo el material posible antes de enterrarlo, alargando la vida útil del vertedero.
Para el tratamiento mecánico-biológico de la fracción resto se ha construido una instalación con una capacidad de tratamiento de hasta 60.000 toneladas, anuales donde se estabilizarán los restos de materia orgánica del rechazo y se recuperarán materiales valorizables. El rechazo se prensará antes de enviarlo hacia el depósito.
En cuanto a la fracción orgánica recogida selectivamente, se descompondrá en túneles de compostaje, se hará un pretratamiento mecánico primario para separar los impropios, y se hará madurar por compostaje aeróbico en silos ventilados, bajo una nave cubierta. Finalmente se obtendrá un compost de calidad para la aplicación agrícola. La capacidad de tratamiento de la fracción orgánica es de unas 10.000 toneladas el año.
La instalación tiene un diseño flexible y podrá asumir escenarios futuros de capacidad sin necesidad de hacer modificaciones y nuevas inversiones, previendo el crecimiento progresivo de la recogida selectiva y el decrecimiento de la fracción resto.
El CTR es titularidad del Consejo Comarcal del Alt Empordà y ha sido financiado íntegramente por la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC), dependiente del Departamento de Territorio y Sostenibilidad, por un importe de unos 24 millones de euros. La instalación permitirá dar servicio a unos 140.000 habitantes, en una zona que recibe los efectos del estacionalidad de la población fruto del impacto del turismo.
Ampliaciones futuras
Fuera del contrato de concesión para desarrollar las instalaciones del centro de tratamiento de la fracción resto y de la fracción orgánica, la ARC financiará, en el marco del convenio con el Consejo Comarcal, otras actuaciones que integrarán el futuro conjunto de las instalaciones ambientales del CTR del Alt Empordà:
- Ampliación del depósito controlado para la disposición de los residuos que no puedan ser valorizados. El proyecto se encuentra en fase de licitación por un presupuesto de 3,68 millones de euros. La previsión es que la ampliación sea efectiva de aquí a un año. Se realizará en dos fases: la primera supondrá ampliar un total de 584.752 m3 y, la segunda, 460.565 m3, que alargarán la vida útil en más de 17 años.
- Desarrollo del proyecto y construcción de un centro administrativo y de educación ambiental para la comarca. Incluirá un edificio de coordinación y comunicación ambiental del Consejo Comarcal, la instalación de un punto limpio que funcionará como centro de gestión y coordinación de los desechos de la comarca, y una planta de desguace de residuos voluminosos y de preparación para su valorización. El proyecto se licitará en pocos meses, con un presupuesto previsto de 4,1 millones de euros, y tendría que estar operativo durante el 2019.