Durante una operación, en la que participaron 16 países, se realizaron más de 1.600 inspecciones y se detectaron cientos de infracciones que acarrearon la detención de siete personas.
Entre el los pasados 20 y 25 de septiembre, Europol participó en una Semana de Inspección Conjunta contra el tráfico ilegal de gases fluorados, durante la que se incautaron 2.105 botellas de estos gases con efecto invernadero, que suponen el equivalente a 142.288 toneladas de CO2 y un valor estimado de más de diez millones de euros.
Dirigidas por los Países Bajos, las acciones contaron con la participación de 16 países, entre ellos España, así como de la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF). Las inspecciones se centraron en la identificación de posibles importaciones ilícitas de gases fluorados en la Unión Europea, la detección de gases fluorados ilícitos comercializados en la UE y sus importadores. El intercambio sistemático de información operativa y de información de inteligencia entre las autoridades policiales, aduaneras y de vigilancia del mercado permitió identificar los puntos conflictivos y los objetivos.
Durante los días que duró la operación se realizaron en total 1.682 inspecciones, detectándose 706 infracciones administrativas y 28 infracciones penales, y practicándose 7 detenciones.
A pesar de los efectos nocivos de los gases fluorados en el medio ambiente, estos refrigerantes sintéticos se utilizan sin respetar las medidas específicas destinadas a reducir su impacto en la atmósfera. Su importación y uso están estrictamente regulados a nivel de la UE y los acuerdos internacionales pretenden reducir gradualmente su producción y consumo.
La normativa de la UE sobre gases fluorados desde 2014 incluye medidas para eliminar progresivamente el consumo y la producción en un 79% para 2030, con el objetivo de avanzar hacia una tecnología más respetuosa con el clima y el uso de alternativas naturales.
La regulación y la aplicación de cuotas a estas importaciones ha provocado un aumento del comercio ilegal de gases fluorados. Los organismos encargados de hacer cumplir la ley, las autoridades aduaneras y los servicios de inspección de gases fluorados han intensificado sus esfuerzos para combatir este comercio ilícito en desarrollo.
Europol seguirá analizando la información recopilada durante las inspecciones para apoyar a los países en las investigaciones de seguimiento y proporcionarles más información sobre el panorama delictivo de este comercio ilegal en la Unión Europea.