El mercado de smartphones reacondicionados crece un 10% anual en un contexto de desaceleración de las ventas totales.
El mercado del reacondicionamiento de dispositivos electrónicos ha ganado un enorme protagonismo en el último año, especialmente en lo referente al sector de la telefonía móvil. De acuerdo con los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística), la escalada inflacionista se tradujo en un aumento de los precios del 8,4% en 2022 y empezó este año en el 5,9%, si bien la cifra descendió hasta el 3,3% el pasado mes de marzo.
En este contexto económico desfavorable, la venta de teléfonos móviles nuevos ha caído en picado en España, mientras que la venta de dispositivos reacondicionados se ha disparado. “La subida de precios de los smartphones, unida al aumento del coste de vida derivado de la crisis inflacionaria, han llevado a los consumidores a modificar sus hábitos y a apostar por alternativas de compra más asequibles, pero de igual calidad”, explica Jacqueline Pistoulet, Country Manager de SMAAART en España. De hecho, en el último año, la marca de móviles reacondicionados ha experimentado un incremento del 24% en las ventas.
Según un estudio elaborado por Canalys, analista líder del mercado tecnológico global, la desaceleración en ventas vivida en 2022 fue la peor de la última década. En unidades totales, en 2022 se vendieron en España 13,4 millones de teléfonos móviles, un 8% menos que en 2021 (cuando la cifra rozó los 14,6 millones). Destacan especialmente las cifras del cuarto trimestre de 2022 cuando, pese a coincidir con las campañas de Navidad y Black Friday, se experimentó una caída en las ventas del 16% con respecto al mismo período del año anterior (3,4 millones frente a 4,1 millones de unidades vendidas).
Por el contrario, desde la consultora IDC señalan que el mercado de los teléfonos móviles reacondicionados cuenta con una tasa de crecimiento anual del 10,3%, lo que demuestra que estamos ante un cambio en los hábitos de consumo y un aumento de la reutilización. En 2022, se vendieron en todo el mundo 282,6 millones de terminales usados y reacondicionados (un 11,5% más que en 2021, cuando fueron 253,4 millones de unidades) y se espera que, en 2026, la cifra alcance los 413,3 millones. El precio, los controles de calidad y la garantía legal hacen que esta opción sea cada vez más popular entre los consumidores.
“El tradicional modelo de consumo lineal, basado en usar y tirar, ha dado paso a uno circular que denominamos slow-tech, cuyo objetivo es alargar la vida útil de los dispositivos y reducir la generación de residuos”, explica la directiva de SMAAART. “Los consumidores de hoy en día no quieren renunciar a tener móviles de alta gama, pero se han dado cuenta de que pueden comprarlos por un precio hasta un 50% más económico y con las mismas garantías de calidad que un móvil nuevo”, añade.
Más allá del ahorro económico, existe un segundo factor que está impulsando las ventas de móviles reacondicionados: la sostenibilidad. “Igual que ocurre con la ropa o los coches de segunda mano, cada vez existe una mayor conciencia sobre la importancia de dar una segunda vida a los dispositivos”, afirma Jacqueline Pistoulet. Por cada móvil reacondicionado, SMAAART asegura que ahorra la emisión de 52 kg de CO2, la extracción de 164 kg de materias primas y el uso de 56 m3 de agua.
Recientemente, esta marca de móviles reacondicionados ha obtenido la medalla de Oro de EcoVadis en reconocimiento a su compromiso medioambiental y social, consiguiendo una puntuación de 71/100 que la sitúa dentro del 4% de empresas mejor valoradas del sector.