Mediante el uso de las TIC, el proyecto permite obtener información en tiempo real sobre el uso y llenado de contenedores, optimizando las rutas y reduciendo el número de recogida.
El proyecto LIFE EWAS tiene como objetivo impulsar la innovación en la gestión de residuos a través de la demostración del potencial de las nuevas tecnologías de la información. Se trata de un proyecto europeo que busca avances en la adopción estandarizada de modelos más sostenibles.
El proyecto ha permitido llevar a cabo sendas pruebas piloto en las ciudades de Sevilla y Chania (Grecia), logrando una notable disminución en los costes asociados a la retirada de contenedores de residuos a través del desarrollo de un sistema tecnológico que permite tener acceso en tiempo real al llenado de cada contenedor. Este proyecto se presentó la semana pasada en la sede de Emasesa.
La prueba piloto desarrollada en Sevilla, coordinada por la empresa Wellness Smart Cities & Solutions, ha demostrado que, gracias a la información obtenida por la plataforma tecnológica sobre el llenado de los contenedores de vidrio, es posible reducir el número de retiradas del residuo, pasando de 3 cada 12 días, hasta 1 cada 7 días, lo que supone un 66% menos de servicios de recogida necesarios.
Esto supone pasar de 100 servicios anuales a 34, lo que permite optimizar las rutas, pasando en el área monitorizada de 3 rutas estáticas a 1 dinámica. Esto se traduce en unas 400 horas anuales menos de un vehículo en la calle, con lo que ello supone para la mejora en el tráfico y la reducción de ruidos y olores provocados por los camiones de recogida.
El sistema se basa en la instalación de sensores comunicados con un software en los contenedores. Dichos sensores envían señales en tiempo real a los operarios para conocer la situación de cada contenedor, proporcionando información sobre el nivel de llenado, posibles daños y otros parámetros que permiten a la entidad gestora tomar decisiones y, sobre todo, establecer una mejor planificación de los servicios de recogida.
Se trata de un importante avance en materia de metodología de gestión de residuos basada en las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación).
Monitorización del servicio
A través de una plataforma LIFE EWAS Social se informa a la ciudadanía de la importancia y los beneficios del reciclaje
Concretamente, la experiencia piloto de Sevilla ha consistido en un periodo de monitorización del servicio en tres rutas de vidrio desarrollado entre los meses de marzo a julio de 2016, el posterior análisis de datos y la puesta en marcha de actuaciones para la optimización del servicio que ha permitido alcanzar las cotas de ahorro mencionadas.
En total, en el caso de Sevilla se monitorizaron un total de 268 contenedores, 215 de vidrio, 29 soterrados de plástico y vidrio y 24 de distinta naturaleza para testar la validez del dispositivo.
La experiencia ha sido posible gracias a una herramienta tecnológica consistente en los dispositivos de medida y plataforma web, desarrollada por Wellness Smart Cities & Solutions y denominada Quamtra. Se trata de un sistema de recogida de información de los contenedores en tiempo real a través de la instalación de agentes remotos.
Por otro lado, el proyecto tiene una importante vocación de concienciación ciudadana para potenciar los hábitos de reciclaje entre la población. Esta labor se canaliza a través de una plataforma, LIFE EWAS Social, donde se informa de la importancia y los beneficios del reciclaje, con consejos para contribuir a la mejora de los procesos de gestión de residuos urbanos. Asimismo, la plataforma ofrece la posibilidad de informar de incidencias sobre la recogida de residuos en las dos áreas piloto.
El proyecto es resultado de la suma de esfuerzos de varias entidades griegas y españolas. Así, junto a la Corporación de Empresas Municipales, Lipasam y Wellness Telecom, participan en el proyecto Dedisa, análoga a Lipasam en Chiana (Grecia), y ENT y D-Waste, como consultoras medioambientales.
El proyecto LIFE EWAS se enmarca dentro de la estrategia de la UE orientada a potenciar entre sus países miembros los esfuerzos para mejorar la gestión de los residuos, la reutilización y el reciclaje bajo su plan de Economía Circular. Para el año 2020, el 50% de los residuos (en peso) han de ser reutilizados o reciclados, mientras que en 2030 ha de ser el 70% (en peso).