La Estrategia plantea una hoja de ruta para dar cumplimiento a los objetivos comunitarios de gestión de residuos domésticos y comerciales, lo que exige un aumento del reciclaje y una reducción del vertido.

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha dado luz verde definitiva a la Estrategia de Residuos de la ciudad con horizonte 2030, que persigue dos objetivos fundamentales: el incremento del reciclaje y la reducción del vertido, según informó recientemente el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.
La denominada Estrategia de Prevención y Gestión de Residuos Domésticos y Comerciales de la Ciudad de Madrid 2030 se ha configurado teniendo en cuenta que la ciudad se enfrenta a tres grandes retos actualmente.
Por un lado, ha de poner todas las medidas necesarias para cumplir con los objetivos de gestión de residuos que marca Europa en este ámbito para 2030. En segundo lugar, ha de ser un eje adicional de sostenibilidad de la ciudad, aplicando mejoras en el tratamiento y la reducción de residuos para así disminuir el impacto sobre la salud humana y el medio ambiente, con especial énfasis en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y sustancias odoríferas. Por último, ha de maximizar la transformación de residuos en nuevos recursos, contribuyendo a la economía circular en el municipio, según las prioridades de gestión de la jerarquía de recursos.
El reto de la separación de residuos
En 2024, los servicios municipales del Ayuntamiento de Madrid gestionaron 1.361.191 toneladas de residuos, es decir, 3.729 toneladas diarias. De forma separada, se recogieron 699.669 toneladas de residuos, un 51,4 % del total, según datos del Ayuntamiento . De conformidad con el art. 25.5 de la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados, “para 2035, el porcentaje de residuos municipales recogidos separadamente será como mínimo del 50 % en peso del total de residuos municipales generados”.
La ciudad ha alcanzado este objetivo previsto en 2024: la recogida separada ha pasado de representar un 20,6% del total en 2018 al 51,4%. Esto se explica por el esfuerzo en avanzar en la contenerización, recogida y tratamiento de flujos de residuos separados en origen. Pero todavía tiene un gran reto en materia de separación, ya que los impropios -residuos que se deberían haber introducido en alguno de los recipientes de recogida separada- que se depositan en el contenedor de fracción resto de tapa naranja superan el 81%.
Aumentar el reciclaje
La Estrategia de Residuos de Madrid plantea una hoja de ruta para dar cumplimiento a los objetivos comunitarios de gestión de residuos domésticos y comerciales, lo que exige un progresivo aumento del reciclaje y una progresiva reducción del vertido: hay que reciclar el 55% de estos residuos en 2025, el 60 % en 2030 y el 65 % en 2035.
En 2024, se reciclaron el 36% de los residuos domésticos gestionados por la vía municipal, mientras que en 2018 fue el 28%. Y si se incluyen los residuos comerciales gestionados por la vía privada (residuos comerciales que se entregan directamente a gestores de residuos), el porcentaje de reciclaje se situó en el 52 % el pasado año, según el Ayuntamiento.
Respecto al objetivo de vertido, la normativa marca un máximo de residuos municipales depositados en vertedero del 40% en 2025; del 20% en 2030 y del 10% en 2035 sobre el total de los residuos municipales generados. En 2024, el 43% de los residuos domésticos y comerciales gestionados por la vía municipal fueron a vertedero frente al 49% en 2018; el porcentaje se sitúa en el 33% en 2024 si se incluyen los residuos comerciales gestionados por la vía privada.
Para lograr el cumplimiento de los objetivos de reducción de vertido, la estrategia propone el mantenimiento de la capacidad de valorización energética de Las Lomas hasta que se pueda cumplir ese objetivo sin necesidad de esa planta.
Contenido de la estrategia
La estrategia recoge nueve programas de actuación (prevención, separación de residuos, tratamiento, reducción de impactos, concienciación, I+D+i, etc.), desarrollados en 44 acciones que aglutinan más de 100 iniciativas. Incluye la previsión de una estrategia específica para la gestión de los residuos generados en los edificios municipales para potenciar la labor ejemplificadora de la administración y colaboraciones con escuelas de formación profesional, centros escolares y otras organizaciones para realizar labores de formación y educación ambiental. Prevé mejoras en los contratos de recogida de residuos, así como medidas para optimizar el tratamiento en las instalaciones del Parque Tecnológico de Valdemingómez.
El documento fomenta y potencia ReMAD, el servicio municipal que impulsa la economía circular mediante el intercambio gratuito de objetos entre los ciudadanos para darles una segunda vida. También prevé medidas de innovación, transparencia, gobernanza, concienciación ambiental, desarrollos normativos y control ambiental exhaustivo, entre otras acciones.
La estrategia incluye también las correspondientes previsiones de seguimiento, evaluación y revisión a fin de realizar una rigurosa supervisión de la ejecución de las acciones que recoge.