En la restauración de la pista se han utilizado más de 22.000 kg de vidrio reciclado por los madrileños durante una campaña desarrollada por Ecovidrio y la NBA.
El pasado miércoles se abrió al público en Madrid de la primera pista de baloncesto reformada con vidrio procedente del reciclado de envases. La cancha municipal rehabilitada se encuentra en el parque Casino de la Reina, en el distrito Centro de la ciudad.
La pista ha sido restaurada gracias al vidrio reciclado por los madrileños en la campaña ‘Sé el jugador más valioso del reciclaje’, en colaboración con Ecovidrio y la NBA (National Basketball Association), puesta en marcha el pasado mes de enero mediante la instalación de 40 contenedores verdes con forma de pelota de baloncesto gigante por toda la ciudad.
Han sido necesarios más de 22.000 kilos de vidrio para realizar la reforma, cuyo procesamiento y reciclaje se ha realizado a través de una técnica innovadora y pionera. La nueva cancha cuenta con un diseño e imagen realizado por la NBA en colaboración con Ecovidrio.
El acto de presentación corrió a cargo de Inés Sabanés, delegada de Medio Ambiente y Movilidad en funciones, y Jorge García Castaño, delegado de Economía y Hacienda y concejal del distrito Centro en funciones. La presentación de la pista rehabilitada contó también con la participación de José Manuel Nuñez-Lagos, director general de Ecovidrio; la dos veces campeona de la WNBA y NBA Ambassador, Amaya Valdemoro; y Chus Bueno, vicepresidente de NBA en Europa, África y Oriente Medio.
Aumenta el reciclaje en Madrid
El Ayuntamiento de Madrid ha continuado mejorando los datos de reciclaje en el inicio de este 2019, después de los excelentes resultados de 2018. Hasta el 30 de abril de este año se han recogido separadamente el 30% de los residuos generados en la ciudad con un aumento del 5,96 % en los envases, del 13,21 % en el caso del papel y cartón, y del 10,74 % en el caso del vidrio.
Además, el porcentaje de la fracción resto no reciclable ha descendido un 8,89%, tendencia que empezó el año pasado y que este año se está acentuando. “La disminución de la fracción no reciclable es el mejor indicador de que se está yendo en la buena dirección hacia la economía circular”, señaló Inés Sabanés.