El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha abierto la consulta pública del proyecto de Real Decreto de transposición de la Directiva comunitaria de reducción del consumo de bolsas de plástico. Hasta el 15 de septiembre se podrán hacer aportaciones y sugerencias al proyecto en el portal web del Ministerio.
Es la segunda versión del borrador que ya fue sometido a consulta pública en diciembre 2016, que exigía el cobro obligatorio de las bolsas de plástico y fijaba unos precios mínimos según el espesor de la bolsa. Tras el proceso de participación pública y consulta a otros departamentos ministeriales, se ha elaborado una segunda versión del proyecto de Real Decreto, que prohíbe las bolsas de plástico ligeras a partir de 2020, excepto las compostables. Teniendo en cuenta el calado de los cambios introducidos y para una mayor seguridad jurídica, se ha decidido someter esta segunda versión del proyecto de real decreto a la tramitación completa del expediente.
Todos los Estados miembros de la Unión Europea, desde la entrada en vigor de la Directiva 2015/720, han de adoptar medidas para reducir el consumo de bolsas de plástico. Entre dichas medidas se incluye su prohibición, lo que ya hacen Francia, Países Bajos o la región belga de Valonia. También, fuera de Europa, se ha decidido prohibir las bolsas de plástico en el Reino de Marruecos o en el Estado de California.
PROHIBICIÓN DE DISTRIBUIR GRATIS LAS BOLSAS
Este proyecto de Real Decreto prohibirá la distribución gratuita de las bolsas de plástico ligeras (las que tienen un espesor de entre 15 y 50 micras y que constituyen la inmensa mayoría de las que se consumen en España), salvo las compostables.
Es decir, los distribuidores deberán cobrar al consumidor un precio por bolsa entregada. Las únicas bolsas de plástico que seguirán siendo gratuitas son las muy ligeras (menos de 15 micras), por razones de higiene o para contener alimentos a granel, como las empleadas para contener fruta, carne, pescado, etc.
PROHIBICIÓN DESDE ENERO DE 2020
A partir de enero de 2020 se prohibirá la venta de bolsas de plástico ligeras y fragmentables, con la excepción de las producidas con material compostable.
La excepción serán las bolsas de plástico muy ligeras detalladas anteriormente (aunque a partir de esta fecha deberán ser compostables), así como las bolsas más gruesas (de más de 50 micras) que podrán seguir entregando los comercios, previo cobro de las mismas, puesto que sus características permiten una mejor reutilización y deberán incorporar un contenido mínimo del 30% de plástico reciclado.
BENEFICIOS PARA TODA LA SOCIEDAD
Estas bolsas tienden a dispersarse transportadas por el aire como basura debido a su reducido peso, lo que genera contaminación en las masas de agua, las riberas del mar y de los ríos y el medio terrestre, con consecuencias graves sobre los ecosistemas asociados a esos medios. Los efectos sobre el medio ambiente se agravan en el caso de las bolsas de plástico fragmentable, que se disgregan en pequeñas partículas que son ingeridas por seres vivos.
Una bolsa de plástico tiene un uso útil medio de 12 minutos y puede tardar hasta 500 años en descomponerse en el medio ambiente. Se estima, además, que tan sólo el 35% de ellas se deposita en los contenedores amarillos para su reciclaje, acabando la mayoría dispersas en el medio ambiente.
Con este proyecto de Real Decreto también se prevé conseguir una mayor limpieza en el entorno al reducirse la suciedad derivada de su abandono, así como lograr una mayor sensibilización de la población por el excesivo consumo de productos de usar y tirar.
REDUCCIÓN DEL CONSUMO DE BOLSAS A LA MITAD
En la última década en nuestro país se ha reducido el consumo de bolsas de plástico prácticamente a la mitad, pasando de 317 bolsas por habitante en 2007 a 144 bolsas por habitante en 2014, según datos del sector, debido fundamentalmente a un cambio en las pautas de consumo de este envase.
Desde que se adoptaron las primeras medidas para la reducción del consumo de bolsas de plástico, la sociedad española las ha ido sustituyendo paulatinamente por bolsas de papel, bolsas de tela, bolsas de rafia, carritos de la compra y otros recipientes. En definitiva, hoy se reclama a los poderes públicos la adopción de medidas contundentes para resolver este problema ambiental de primer orden.
PRÓXIMOS PASOS
Actualmente está en elaboración la Estrategia Europea de Plásticos por parte de la Comisión Europea, en el marco de la cual se está analizando la situación de este material en Europa (producción, consumo, tipología, impactos, gestión de residuos…), y es previsible que se avance a nivel comunitario en medidas para la reducción del consumo de otros productos de usar y tirar fabricados con plástico, como es el menaje desechable (platos, vasos, cubiertos, pajitas), tal y como ya ha regulado Francia, e incluso a prohibir la presencia de microplásticos en productos cosméticos como solicitan otros muchos países.
En función de las disposiciones que se adopten en el ámbito de la UE, el Gobierno de España adoptará medidas en consonancia para hacer frente de forma efectiva al grave problema de la contaminación del medio por residuos de plástico.