A través de diversos programas de investigación, la compañía aspira a «romper los límites tecnológicos actuales» para reintroducir en el mercado «metales hoy en día no recuperados».
La empresa vasca Metallo, nacida con el nombre de Elmet y radicada en Berango (Bizkaia), invertirá 11,5 millones de euros en su planta de la mencionada localidad entre los años 2018 y 2021, a través de distintos proyectos con los que buscará nuevas soluciones tecnológicas que le permitan maximizar la valorización de metales. Así lo explicó el director general de Metallo Spain, Valentín Casado, en el marco de una visita institucional la semana pasada.
La diputada foral de Sostenibilidad, Elena Unzueta, junto a representantes de los municipios vecinos, realizaron una visita a las instalaciones de Metallo Spain, que en 2017 cumplió 25 años de andadura y que el año pasado, a través de actividades de valorización, reintrodujo en la industria un total de 38.000 toneladas de metales no férreos como cobre y estaño (un 5% más que el año anterior).
En los próximos años, la compañía invertirá en varios proyectos de investigación de tecnologías que permitan reintroducir en el mercado «metales hoy en día no recuperados» y generar nuevos productos con las escorias finales. Con ello harán frente al desafío que supone la previsión de que «los materiales a valorizar para recuperar los metales cada vez serán más escasos y de menor riqueza».
En el transcurso de la visita, Casado expuso algunos de los retos que se ha marcado para los próximos años la empresa, integrada en Metallo Group. Estos incluyen la inversión en distintos proyectos de investigación con los que aspiran a «romper los límites tecnológicos actuales» de la valorización de metales y que supondrán inversiones de 11,5 millones de euros en Berango. El presupuesto, según adelantó el director general de Metallo Spain, estará además «abierto a ampliaciones para asumir la industrialización de nuevos procesos» si se confirma la rentabilidad de alguno de los proyectos de I+D+i en desarrollo.
La empresa cuenta con una plantilla de 90 trabajadores directos en Berango y traccionó la economía local en 2017 con la inversión en Euskadi de 4,5 millones en servicios y equipos y de 7 millones en la compra de materia prima para su valorización.