La firma vasca de reciclaje aumentó un 19% su facturación, hasta los 206 millones de euros, e incrementó su plantilla hasta alcanzar los 90 empleados.
La compañía de reciclaje Metallo, radicada en Berango (Bizkaia), aumentó la valorización de materiales en un 5% en 2017 y ha reintroducido en la industria un total de 38.000 toneladas, devolviendo los metales a la cadena de valor. La empresa, que en 2017 ha celebrado su XXV aniversario, aumentó con ello un 19% su facturación, hasta los 206 millones de euros, e incrementó su plantilla hasta los 90 trabajadores.
Esta actividad ha permitido, además, realizar inversiones en Euskadi por valor de 4,5 millones en servicios y equipos, y de 7 millones en compra de materia prima procedente de procesos anteriores. “Para Metallo es muy importante la vinculación y la colaboración con el entorno y con el tejido empresarial cercano, y que nuestro crecimiento esté unido al de la economía vasca”, resalta el director de Metallo Spain, Valentín Casado.
Coincidiendo con la celebración de sus 25 años, la firma estrenó además en 2017 la denominación Metallo Spain y una nueva andadura dentro de Metallo Group, una firma internacional con sede también en Bélgica. Esto permite a Metallo “competir con mayor fuerza en los mercados” y mirar al futuro “con gran ilusión” junto a los socios belgas.
“Estamos muy orgullosos del trabajo realizado este año por todo el equipo, un esfuerzo que nos ha permitido seguir creciendo y mirar al futuro con confianza”, destaca el director de Metallo Spain.
Nacida con el nombre de Elmet, Metallo Spain realizó su primera pieza fundida de cobre en Berango el 25 de noviembre de 1992. Desde entonces ha ido evolucionando y creciendo hasta alcanzar una plantilla estable de 90 trabajadores y dos líneas de trabajo, una dedicada a la fundición y otra al chopeado de cables. La primera produce principalmente lo que se conoce como “cobre negro” (33.000 toneladas anuales), “soldadura” de estaño (5.000 toneladas anuales), materiales para construcción (55.000 toneladas de Elmix®) y productos de valorización del zinc (2.500 toneladas anuales). La línea de chopeado, por su parte, produce unas 1.300 toneladas anuales de granulado de cobre a partir de cables, un producto que se consume fundamentalmente en España.
Todo ello permite devolver a la industria nuevas materias primas procedentes de procesos anteriores, a los que se da una nueva vida, en línea con los fundamentos del nuevo modelo de economía circular que se está implantando en Europa y con el que Bizkaia y Euskadi tienen un sólido compromiso.