El crecimiento tanto en población como en tamaño de las urbes implica un aumento de los retos medioambientales, ya que son las ciudades las que requieren la mayoría de servicios energéticos. Así, se estima que la demanda energética crecerá un 40% en 2030, según datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
En este sentido FCC Energía y Sostenibilidad y el Centro Tecnológico Cetemmsa colaboran en el proyecto Enercity, enmarcado en el ámbito de las smarts cities o ciudades inteligentes.
En concreto, el proyecto tiene como objetivo generar un producto fotovoltaico flexible para producir electricidad a través del mobiliario urbano de las ciudades. Esta energía, de bajo coste y no contaminante, servirá para satisfacer las necesidades energéticas de los ciudadanos en el espacio urbano.
De esta forma, Enercity transformará los elementos urbanos como marquesinas, paradas de bus, farolas, bancos, carteles, toldos o techos en objetos inteligentes generadores de energía.
El proyecto contempla también el desarrollo de un proceso de fabricación de paneles solares flexibles, de tal manera que esta tecnología pueda extrapolarse a escala industrial con un coste de fabricación inferior al resto de las tecnologías fotovoltaicas existentes.
“Los resultados de esta iniciativa supondrán para los nuevos entornos urbanos la posibilidad de un mayor número de emplazamientos dotados de tecnología fotovoltaica, aportando mayor valor añadido al mobiliario urbano”, indica María Teresa de Ugarte, de FCC Energía y Sostenibilidad.
Financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad, a través del subprograma INNPACTO, el proyecto tiene un presupuesto global de 1,3 millones de euros y una duración de 40 meses. Enercity fue presentado también en el Smart City Expo World Congress de Barcelona.