El sistema ISS de clasificación por inducción ofrece la solución ideal cuando los componentes metálicos no se pueden seleccionar mediante la separación magnética ni la clasificación de metales no férricos.
Se trata, entre otros componentes, de acero inoxidable y distintos restos de metal depositados en materiales triturados, residuos domésticos, escorias, chatarra electrónica, astillas de madera, vidrio y arena de moldeo. Abarca una gama de múltiples aplicaciones y, en todos los casos, sustituye la siempre costosa y poco efectiva clasificación manual.
La recuperación de metales sumamente valiosos en materiales no ferrosos separados y escorias de acero inoxidable, así como la separación de circuitos impresos en metales no ferrosos en el separador por corriente de Foucault, son parte de su campo de aplicación. Otra posibilidad de uso viene dada por la separación de metales, destinada a asegurar la calidad de distintas clases de materia a granel.
El principio del sistema ISS de clasificación por inducción se basa en una combinación de sofisticada tecnología en sensores para detectar metales y una separación de metales por medio de toberas de aire controladas por ordenador.
El resultado es una rentabilidad superior y un eslabón más en la cadena de valor gracias a la gran recuperación de materiales limpios y de forma continua, sin fluctuaciones.
En cuanto al modo de funcionamiento, una cinta transportadora de marcha rápida transporta material a granel preclasificado y distribuido uniformemente, a través de un transportador de canal y hasta el cilindro de cabecera.
Debajo de la cinta transportadora, y directamente delante del cilindro de cabecera del ISS, se encuentran yuxtapuestos unos sensores de metal que analizan por inducción magnética el material en toda anchura de la cinta. En cuanto se detectan metales, se envían señales eléctricas a un control central. Según la programación, las toberas de aire comprimido, controladas individualmente y ubicadas detrás del cilindro de cabecera, expulsan los metales detectados