El proyecto europeo CloseWEEE ha diseñado una innovadora tecnología de tratamiento con microondas para los residuos de baterías de iones de litio.
Utilizando nuevas herramientas y metodologías, el proyecto europeo CloseWEEE espera mejorar la recogida, tratamiento y reciclaje de productos electrónicos al final de su vida útil. Tal como se explica en el sitio web del proyecto, su principal objetivo es «incrementar el alcance y la rentabilidad de los materiales recuperados de los flujos de RAEE»».
CloseWEEE tiene como fin desarrollar y poner en práctica tecnologías de recuperación sólidas y rentables, dar nueva vida a los materiales reciclados en aplicaciones de valor añadido y ofrecer herramientas eficientes para la localización y separación de materiales peligrosos y valiosos.
Recientemente, CloseWEEE diseñó y comprobó una innovadora tecnología de tratamiento con microondas para los residuos de baterías de iones de litio (Li-ion), ampliamente utilizadas en teléfonos móviles, ordenadores portátiles… Como parte de esta técnica, «las baterías se someten a un tratamiento previo de descarga y procesamiento mecánico. El material de las baterías de iones de litio a continuación se introduce en un horno microondas, donde se calienta rápidamente y se pirolizan o evaporan las sustancias orgánicas (electrolitos y separadores, etc.)». Esto permite producir «material sin electrolitos para el tratamiento hidrometalúrgico posterior para la recuperación de metales … [cobalto, níquel, manganeso, litio] y grafito».
Esta tecnología permite recuperar materias primas fundamentales como el cobalto y el grafito, utilizadas en multitud de productos
La recuperación de materias primas fundamentales, como el cobalto y el grafito, es crucial porque se utilizan para la producción de una amplia gama de productos y aplicaciones, incluyendo productos de alta tecnología e innovaciones emergentes. El material generado mediante el reciclaje de baterías, por ejemplo el cobalto, se puede utilizar en la industria de las baterías, del acero u otros sectores, dependiendo de la calidad del material reciclado. El grafito, cuyo reciclaje es bastante limitado, es otra materia prima fundamental que se emplea en diversas aplicaciones industriales, incluyendo lubricantes de alta temperatura, la fabricación de acero, teléfonos inteligentes y baterías de iones de litio.
Tal como se explica en un documento de trabajo de los servicios de la Comisión Europea, un teléfono inteligente puede contener hasta cincuenta metales diferentes. Esto hace que sea ligero y, por su reducido tamaño, fácil de utilizar. Las materias primas fundamentales son irremplazables en paneles solares, turbinas eólicas, vehículos eléctricos y la iluminación energéticamente eficiente. Por consiguiente, también son importantes para luchar contra el cambio climático.
Ya en su año final, el proyecto CloseWEEE (Integrated solutions for pre-processing electronic equipment, closing the loop of post-consumer high-grade plastics, and advanced recovery of critical raw materials antimony and graphite) ha contribuido asimismo a la producción de un compuesto de acrilonitrilo butadieno estireno de alto brillo. Se consiguió con una mezcla que contenía materiales reciclados procedentes de residuos de pequeños electrodomésticos. Según el sitio web del proyecto, «el compuesto posee una gran calidad y es adecuado para aplicaciones en nuevos equipos eléctricos y electrónicos». El acrilonitrilo butadieno estireno es un tipo específico de polímero plástico que se suele emplear en el proceso de impresión 3D.
Europa, segunda región que más residuos electrónicos genera
El procesamiento y reciclaje de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), tales como ordenadores, televisores, neveras y teléfonos móviles, es hoy más importante que nunca por el rápido aumento del consumo de estos productos. Europa fue la segunda región del mundo que más residuos electrónicos produjo en 2016 con 12,3 millones de toneladas (MT), después de Asia que generó 18,2 MT. A pesar de la legislación vigente, los informes indican que globalmente tan solo se recogieron y reciclaron 8,9 MT de residuos electrónicos. Esto equivale al 20% de todos los residuos electrónicos generados.
Fuente:
Cordis