El documento identifica distintas formas en que la economía social contribuye a la economía circular, y recoge una serie de propuestas y orientaciones políticas para desarrollar un marco propicio para este sector.
La OCDE ha publicado un informe de política muy importante sobre la contribución de la economía social a la economía circular. La organización europea de entidades de reutilización RREUSE ha celebrado la publicación de dicho documento, ya que «expresa con razón el papel pionero de las empresas sociales en la expansión de las prácticas de economía circular».
RREUSE considera prometedor ver instituciones como la OCDE y la Comisión Europea expresando su apoyo a la economía social y circular, y aplaude especialmente el análisis integral del sector y el reconocimiento de que las empresas sociales activas en la economía circular serán esenciales para lograr un futuro inclusivo y circular.
Si bien el Plan de Acción Europeo de Economía Circular ya había reconocido el potencial de creación de empleo de las empresas sociales, este nuevo informe identifica cinco formas en que la economía social puede contribuir a la transición hacia una economía circular:
- La economía social tiene una experiencia demostrada en el desarrollo de actividades circulares.
- Hace más inclusiva la transición a la economía circular.
- Puede inspirar modelos y prácticas empresariales basados en la colaboración a nivel local.
- Fomenta la participación de las partes interesadas y mejora la aceptación social de los productos circulares y las tecnologías verdes.
- Promueve comportamientos más circulares y sostenibles.
RREUSE tuvo la oportunidad de contribuir al proceso de consulta, incluida la provisión de datos de creación de empleo e integración laboral. Según datos recientes de la organización, la mayoría de las empresas sociales crean entre 40 y 100 puestos de trabajo por cada 1.000 toneladas de material recolectado y valorizado para actividades orientadas a la reutilización. Además, entre el 45% y el 80% de los trabajadores de la mayoría de las empresas sociales de la red de RREUSE son personas desfavorecidas.
La OCDE identifica orientaciones políticas para desarrollar un marco propicio para las organizaciones de economía social que contribuyan al cambio hacia la economía circular. El informe pone un fuerte énfasis en reforzar las sinergias entre las agendas sociales y circulares, incluida la necesidad de definir objetivos comunes, alinear las prioridades políticas entre sectores y niveles de gobierno, e inducir el diálogo y facilitar las alianzas entre varios actores a lo largo de la cadena de valor de la economía circular.
El resumen de políticas también establece recomendaciones que RREUSE ha apoyado firmemente a lo largo de los años. Estas incluyen eliminar las barreras para acceder al flujo de residuos y bienes de segunda mano, garantizar que los instrumentos financieros estén disponibles para las empresas sociales independientemente del tamaño y la forma legal, introducir cláusulas sociales y circulares en la contratación pública para impulsar la demanda del mercado y apoyar la formación y la inserción laboral a través de programas de certificación de competencias.
También se recogen otras propuestas como apoyar la medición del impacto, mejorar la investigación y los datos para comprender mejor las sinergias entre la economía social y la circular, reforzar la innovación a través de incubadoras financiadas con fondos públicos y el apoyo a proyectos piloto de alto potencial.
Michal Len, director de RREUSE, ha afirmad que “estamos encantados de ver a la OCDE destacando la contribución de la economía social a la economía circular y expresando su apoyo a un marco de políticas propicio para impulsar el sector. Un fuerte énfasis en reforzar los vínculos entre las economías sociales y circulares es particularmente bienvenido, ya que esto facilitaría una economía más resiliente con la inclusión y sostenibilidad en el centro. RREUSE está lista para contribuir al desarrollo de una agenda social y circular conjunta que facilite asociaciones, objetivos comunes y prioridades políticas en todos los departamentos gubernamentales”.