La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. ha anunciado este lunes el Plan de Energía Limpia, el cual por primera vez reduce la contaminación de carbono de las centrales eléctricas existentes.
La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU (EPA) propone primeras directrices para reducir la contaminación de carbono de centrales eléctricas existentes. El Plan de Energía Limpia es una propuesta flexible para asegurar un medio ambiente más saludable, fomentar la innovación y fortalecer la economía.
Bajo la dirección del presidente Obama y después de un esfuerzo de alcance público sin precedente, la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. ha publicado este lunes la propuesta para un Plan de Energía Limpia, el cual por primera vez reduce la contaminación de carbono de las centrales eléctricas existentes, la fuente singular más grande de contaminación de carbono en Estados Unidos. La propuesta de hoy protegerá la salud pública, encaminará a Estados Unidos hacia un medio ambiente más limpio y combatirá el cambio climático mientras suministra a las personas en Estados Unidos con una energía fiable y asequible.
“El cambio climático, generado por la contaminacion de carbono, sobrecarga los riesgos a nuestra salud, a nuestra economía y a nuestra manera de vida. La EPA está cumpliendo con una pieza vital del Plan de Acción Climática del Presidente Obama al proponer un Plan de Energía Limpia que reducirá la contaminación de carbono dañina de una de nuestras fuentes más grandes—las centrales eléctricas”, declaró la administradora de la EPA Gina McCarthy. “Al potenciar las fuentes de energía más limpia y reducir el desperdicio de energía, este plan limpiará el aire que respiramos mientras ayudará a aminorar el cambio climático para que podamos dejar un futuro más sano y saludable para nuestros hijos. No vamos a elegir entre una economía saludable y un medio ambiente saludable—nuestra acción fortalecerá la ventaja competitiva de Estados Unidos, fomentará la innovación y creará empleos”.
Las centrales eléctricas representan aproximadamente una tercera parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero en Estados Unidos. Aunque hay límites en vigor para el nivel de arsénico, mercurio, dióxido de azufre, óxidos de nitrógenos, y contaminación de partículas que las centrales eléctricas pueden emitir, en la actualidad no hay límites nacionales para los niveles de contaminación de carbono.
Con el Plan de Energía Limpia, la EPA está proponiendo directrices que usan como base las tendencias que ya han sido emprendidas en los estados y el sector de la energía para reducir la contaminación de carbono de las centrales eléctricas existentes, haciéndolas más eficientes y menos contaminantes. Esta propuesta sigue los pasos de sentido común presentados en el Plan de Acción Climática del Presidente Obama y el Memorándum Presidencial de junio del 2013.
Para el 2030, los pasos firmes y responsables que la EPA está tomando habrán de:
- Recortar a nivel nacional las emisiones de carbono del sector energético en un 30 por ciento por debajo de los niveles del 2005, lo que equivale a las emisiones de proveer energía a más de la mitad de los hogares en EE.UU. en un año.
- Recortar la contaminación de partículas, óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre por más del 25 por ciento como un beneficio colateral;
- Evitar más de 6,600 muertes prematuras, hasta 150,000 ataques de asma en niños y hasta 490,000 días laborales o escolares perdidos, proporcionando hasta $93,000 millones en beneficios para el clima y la salud pública
- Reducir las facturas eléctricas aproximadamente en un 8 por ciento al aumentar la eficiencia energética y reducir la demanda en el sistema eléctrico.
El Plan de Energía Limpia se implementará mediante un consorcio estatal y federal bajo el cual los estados identificarán su trayectoria a seguir con respecto al uso de políticas de producción de energía eléctrica y control de contaminación ya sean vigentes o nuevas para cumplir con las metas del programa propuesto. La propuesta provee directrices para los estados desarrollar planes para cumplir con las metas específicas de su estado para reducir la contaminación de carbono y les ofrece la flexibilidad para diseñar un programa que tenga el mayor sentido para su situación particular. Los estados pueden escoger la combinación de generación energética correcta al usar una variedad de combustibles, eficiencia energética y la gestión conforme a la demanda necesaria para cumplir sus metas y satisfacer sus propias necesidades. También les permite trabajar por separado para desarrollar sus propios planes individuales o trabajar en combinación con otros estados para desarrollar planes multiestatales.
Además, la propuesta incluye un calendario flexible para que los estados sigan para presentar sus planes a la agencia, con la fecha límite de entrega en junio del 2016 y con la opción de usar un proceso de dos fases para someter los planes finales si necesitaran tiempo adicional. Los estados que ya han tomado acción temprana para abordar las emisiones de dióxido de carbono o que hayan establecido programas de eficiencia energética o energía renovable se beneficiarán al poder aplicar las reducciones de emisiones que resulten de estos programas durante el periodo de cumplimiento para alcanzar su meta.
Desde el verano pasado, la EPA se ha comunicado directamente con gobiernos estatales, tribales y locales, líderes industriales y sindicales, organizaciones sin fines de lucro, y otros. Los datos, la información y los comentarios recibidos durante este esfuerzo ayudaron a guiar el desarrollo de la propuesta y reafirmaron que ya por muchos años los estados han estado abriendo camino para ahorrarle dinero a las familias y los negocios mediante mejoras de eficiencia energética, mientras limpiaban la contaminación de las centrales eléctricas. Hasta la fecha, 47 estados tienen servicios públicos que han implantado programas que funcionan a base de la eficiencia energética conforme a la demanda. 38 estados tienen un conjunto de estándares o metas para energía renovable, y 10 tienen programas de emisiones de gases de invernadero basados en el mercado. En conjunto, la agencia considera que estos programas representan un enfoque comprobado y de sentido común para reducir la contaminación de carbono; un enfoque en el cual la electricidad se genera y se utiliza de la manera más eficiente posible y que promueva una mayor dependencia en fuentes energéticas bajas en carbono.
El anuncio marca el inicio de la segunda fase de los esfuerzos de alcance público de la agencia. La EPA establecerá un periodo de 120 días para recibir comentarios públicos, además de cuatro sesiones de audiencias públicas sobre el propuesto Plan de Energía Limpia. El 29 de junio de 2014, se celebrarán audiencias en Denver, CO y Atlanta, GA. El 31 de junio de 2014, se celebrarán audiencias en Washington, DC y Pittsburgh, PA. Basado en este insumo, la EPA finalizará los estándares a finales del próximo junio siguiendo el itinerario establecido en el Memorándum Presidencial de junio de 2013.
En el 2009, la EPA determinó que la contaminación de gases de efecto invernadero amenaza la salud y bienestar de personas en Estados Unidos al conllevar a cambios duraderos en nuestro clima que tienen una gama de efectos negativos en la salud y el medio ambiente. El tomar pasos firmes y responsables para reducir la contaminación de carbono de plantas de energía eléctrica existentes protegerá la salud de los niños y encaminará a nuestra nación hacia un ambiente más limpio y más estable para generaciones futuras, mientras suministrará la energía fiable y asequible necesaria para el crecimiento económico.