La inclusión de criterios de economía circular en los procesos de compra pública verde o la discriminación positiva para el uso de materiales reciclados son algunas de las propuestas recibidas.
La Diputación Foral de Gipuzkoa está sometiendo su nuevo Plan Integral de Gestión de Residuos (PIGRUG 2019-2030) a un proceso de deliberación participativa para dar a conocer y socializar la realidad actual de la gestión de los residuos urbanos de Gipuzkoa, promoviendo la participación de todos los agentes competentes en materia de residuos, de agentes sociales y de la ciudadanía. Actualmente, el proceso se encuentra en fase de devolución de resultados. Han participado un total de 164 agentes, los cuales han realizado 173 aportaciones en materia de residuos.
El diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, destacó la gran participación del sector de la reutilzación y del reciclaje guipuzcoano en el presente proceso de deliberación participativa, representado por el clúster de reutilización y reciclaje de Gipuzkoa ‘GK Recycling’. Concretamente, el 39% de la asistencia ha correspondido a dicho sector, que ha realizado aportaciones muy significativas al documento.
Gipuzkoa pretende implantar un sistema de gestión sin vertederos y capaz de tratar el 100% de sus residuos con medios propios
Las propuestas recibidas se han referido principalmente a temas tales como la necesidad del aumento de la frecuencia de las caracterizaciones de los residuos urbanos; el control y seguimiento de los residuos comerciales e institucionales asimilables a domiciliarios (RICIA) y de los residuos de construcción y de demolición (RCD); la creación de un grupo de trabajo de compra pública verde, la necesidad añadir el concepto de compra circular al programa de compra pública verde con el fin de potenciar el uso de proveedores de cercanía y el análisis conjunto de la acción fiscal con otros Departamentos forales; la discriminación positiva para el uso de materiales reciclados, el impulso a la entrada de productos reciclados y reutilizados a través de un porcentaje obligatorio en los contratos públicos de obras y servicios, el análisis de necesidades de un sistema y un centro de preparación para la reutilización público, y la potenciación del principio de proximidad en la gestión de residuos.
El proceso de deliberación participativa de este nuevo Plan de Gestión de Residuos se desarrolla en tres fases: una primera fase informativa que se llevó a cabo en septiembre, una segunda fase deliberativa que se celebró en octubre y una última fase denominada fase de devolución de resultados que se está llevando a cabo en la actualidad.
Objetivos de reciclaje
Durante las dos primeras fases, se ha socializado el anteproyecto entre los principales actores territoriales para realizarlo de forma consensuada, legitimada y contrastada. Para ello se han ejecutado seis sesiones informativas y deliberativas con diferentes agentes del territorio: órganos con competencia directa en la gestión de residuos como son la Dirección General de Medio Ambiente, el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK), mancomunidades y técnicos municipales; miembros del clúster de reutilización y reciclaje ‘GK Recycling’; miembros del clúster de moda sostenible ‘GK Green Fashion’; asociaciones de consumidores, Banco de Alimentos de Gipuzkoa, centros comerciales y sector HOREKA, y grupos ecologistas, sindicatos y plataformas ciudadanas. También han participado los grupos políticos y la Comisión de Medio Ambiente de las Juntas Generales de Gipuzkoa.
El nuevo plan fija como objetivo alcanzar el 70% de reciclaje en el año 2030, superando los objetivos europeos del 65%
El proceso de deliberación participativa ha comenzado una vez garantizados los objetivos establecidos en su día por el del Plan de Residuos y con su programa de infraestructuras puesto en marcha. Sobre estas bases, el nuevo PIGRUG (2019-2030) establece como objetivo situar el reciclaje en el 70% (2030) y valorizar la energía de los residuos no reciclables.
Gipuzkoa pretende de esta manera implantar un sistema de gestión sin vertederos y capaz de tratar el 100% de sus residuos, con medios propios y un vertido cero de residuos primarios.
Asensio manifestó que es un salto cualitativo porque con el PIGRUG 2019-2030 “por primera vez, Gipuzkoa abordará un Plan de residuos en igualdad de condiciones con los países más desarrollados de Europa”. El nuevo plan fija como objetivo alcanzar el 70% de reciclaje en 2030, superando los objetivos europeos en la materia que fijan un porcentaje del 65%.
Los objetivos establecidos del Plan Integral de Gestión de Residuos de Gipuzkoa 2019-2030 son: maximizar la prevención; optimizar al máximo la recogida selectiva y el reciclaje; avanzar al máximo en el compostaje y la biometanización de la materia orgánica; valorizar la totalidad de los residuos no reciclables y el vertido cero de residuos primarios.