La agencia de reciclaje británica Business Waste prevé un futuro en el que las viviendas cuenten con su propio sistema de trituración y clasificación de residuos plásticos, que posteriormente podrán venderse o aprovecharse como material de impresión 3-D.
La gente debería poder reciclar los plásticos en sus propios hogares, y las viviendas de nueva construcción deberían incluir la tecnología necesaria para ello. Esta es la visión de la mayor compañía británica de reciclaje, que recuerda que ya existe la tecnología para convertir los plásticos en pellet u otros productos de utilidad.
La agencia británica de gestión de residuos Business Waste sabe que aunque esta tecnología no está aún disponible para cada hogar, sería el mayor avance para lograr una completa economía del reciclaje en Reino Unido. “Estamos en la fase más inicial de este concepto, pero esto tiene un enorme potencial de crecimiento”, dice Mark Hall, portavoz de Business Waste. “El sueño es tener uno en cada casa”, añade.
El reciclaje de plástico se realiza principalmente por grandes empresas y consiste en la recogida de residuos plásticos de los hogares y la industria para ser triturado y procesado. Pero el proceso ha sido desarrollado para permitir trituradores domésticos, muy similares a los cubos de basura que todos tenemos en la cocina. Las familias dispondrán de sus residuos plásticos peletizados y clasificados, que podrán vender a empresas o utilizar para sus propios fines. Estos usos domésticos incluyen el uso de pellets de plástico como materia prima para las impresoras 3D.
Triturar y olvidarse
Mark Hall prevé un futuro donde las familias simplemente puedan tirar los plásticos no deseados por un conducto en su cocina, y estos sean triturados y recogidos «entre bambalinas». Aunque esto posiblemente “no es apto para todos los hogares”, el portavoz de Business Waste cree que fácilmente podría implementarse en primer lugar en las viviendas más modernas y sofisticadas, y que posteriormente “se generalice en la industria de la construcción inmobiliaria”. Según explica, el potencial de la tecnología es enorme: «es literalmente triturar y olvidarse, y los pellets plásticos estarán listos para llevar».
Pero para aquellos que quieren llevar el concepto a su conclusión lógica, los residuos plásticos pueden ser triturados y convertidos en otros productos de plástico en el propio hogar. «Los pellets de plástico se convierten fácilmente en la ‘tinta’ para impresoras 3-D, y a partir de ahí, el cielo es el límite”, explica Hall. En este sentido, ya hay quien ha experimentado con residuos plásticos domésticos para fabricar platos, cuencos, tazas y otros artículos en sus propias casas y garajes. «La tecnología esta ahí, es cada día más barata, y existe una disposición a utilizarla”, subraya Hall.
«Nos dirigimos hacia una sociedad sin residuos donde todo el mundo esté involucrado con el reciclaje,» dice el portavoz de Business Waste. «No todo el mundo está de acuerdo con el concepto, pero muchos ven un futuro que rebaja los costos de la industria por el constante reciclaje de materiales. Y el mejor lugar para avanzar hacia una sociedad sin residuos es en el hogar. Esto va a ser algo común en un futuro no lejano”.