Un tejido reciclado para ropa laboral, un envase rellenable de productos de limpieza y una defensa de amarre en muelle inteligente y fabricada con plásticos recuperados del Mediterráneo se han alzado este año con los galardones.
El secretario general del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya, Josep Vidal i Fàbrega, junto con el director de la Agencia de Residuos de Catalunya (ARC), Isaac Peraire i Soler, y la directora general de Calidad Ambiental y Cambio Climático, Mireia Boya e Busquet, entregaron la semana pasada los galardones del Premio Cataluña de Ecodiseño 2023, en una ceremonia en el Disseny Hub de Barcelona. Este premio, que convoca cada dos años el Departamento de Acción Climática, reconoce productos en el mercado y en desarrollo diseñados, fabricados o ejecutados en Cataluña que integran en su diseño consideraciones para mejorar su comportamiento ambiental a lo largo del ciclo de vida. El jurado valora principalmente la incorporación de estrategias de ecodiseño y la contribución a la economía circular, la calidad del diseño y la innovación.
De entre las 80 candidaturas presentadas en esta quinta edición del premio, las ganadoras de las tres distintas categorías han sido el tejido Ecoloop UB para ropa laboral; Eco Duo, un envase de productos de limpieza, y Veluga, una defensa de amarre en el muelle. Además, se entregaron siete menciones.
Producto: Tejido Ecoloop UB para ropa laboral
El premio para la categoría Producto va dirigido a productos en el mercado que tienen en cuenta consideraciones ambientales en su proceso de desarrollo, con el objetivo de minimizar su impacto sobre el medio ambiente a lo largo de todo el ciclo de vida. El galardón ha sido para la empresa Techni Tiger, de Castellbell y el Vilar (Bages), por su Tejido Ecoloop UB, un tipo de tejido para confeccionar prendas laborales. Ecoloop UB contiene hasta un 65% de fibras recicladas. Da prioridad al uso de la viscosa como sustituto del algodón y del poliéster reciclado postconsumo como fibra sintética. Las propiedades técnicas son equiparables a las de un tejido convencional y permiten adaptarse a las necesidades del cliente.
En esta categoría ha habido dos menciones. La primera, para el carrito de la compra sostenible 8 Plus, de Rolser, de la empresa Innou de Barcelona, diseñado por Antoni Parera Buxeres. Se trata del primer carrito de la compra fabricada exclusivamente con plásticos reciclados. El chasis está fabricado con polipropileno reciclado (rPP) y la tela de la bolsa con PET reciclado (rPET de botellas de plástico recicladas). La estructura y el sistema de plegamiento están diseñados con el mínimo número de piezas posible. Una vez finaliza la vida útil, se puede volver a reciclar gracias a la facilidad con la que se separan sus partes.
La segunda mención ha sido por TecnoGrabber, un sistema de redes para la retención de residuos sólidos diseñado por Tecnoconverting Engineering, de Sant Fruitós de Bages (Bages). Este sistema se instala en los aliviaderos del alcantarillado para evitar que lleguen residuos sólidos a los ríos cuando hay episodios de lluvias intensas. Consta de una parte estructural de acero inoxidable de alta durabilidad, a prueba de corrosión y 100% reciclable, y de una malla de nylon que se cambia fácilmente y que se desecha junto con los residuos que se recogen.
Producto en desarrollo: Eco Duo, envase de productos de limpieza
Proquimia, de Vic (Osona), ha recibido para su envase Eco Duo el premio en la categoría de Producto en desarrollo que reconoce proyectos de producto o servicio en fase de prototipo o piloto. Eco Duo es una solución para aumentar la circularidad de los envases listos para usar (ready to use) que contienen productos de limpieza concentrados. El envase pulverizador está diseñado con una doble cavidad: una para el agua, que se puede rellenar muchas veces, y otra que contiene el detergente/desinfectante concentrado y que permite obtener unos 10 litros de solución final. Se incluye un cabezal que realiza la dilución entre el agua y el producto concentrado de acuerdo con los requisitos de aplicación de cada uno.
Esta categoría ha tenido en esta ocasión tres menciones. La primera para Fizzycaps, de Barcelona, por sus tapones circulares para la fermentación del cava. Un nuevo sistema de cierre de las botellas donde fermenta el vino para la producción de cava, de polietileno monomaterial de una sola pieza y 100% reciclable. Incluye un sistema de recuperación de los tapones una vez utilizados por la propia empresa.
La segunda ha sido Ya-go, una tabla de surf modular de los diseñadores de Maxuca, con partes personalizables, fabricada parcialmente con PET reciclado, bioresinas y biofibra. La unión de los módulos se realiza mediante un sistema plug & play en proceso de patente que reduce las mermas y la utilización de tornillos de ensamblaje. La modularidad permite también optimizar el espacio durante el almacenamiento.
Por último, la tercera mención ha sido para Circutex, un contenedor textil circular de Solidança Treball, de Sant Just Desvern (Baix Llobregat), para la recogida de residuos textiles, fabricado con un fieltro hecho a base de fibras de poliéster monomaterial (70% de residuo textil postconsumo reciclado) y grabado con láser sin tintas ni pigmentos, fácilmente reciclable.
Diseño joven: Veluga, defensa de amarre en muelle
En la categoría Diseño joven, que premia productos en el mercado o en desarrollo que estén desarrollados por estudiantes o personas tituladas recientemente, el ganador ha sido Joan Pahissa Aranda, de la Escuela Universitaria de Diseño e Ingeniería de Barcelona Elisava, por un sistema de defensa de amarre en muelle, llamado Veluga, fabricado con plásticos reciclados recogidos del mar Mediterráneo. Unos sensores integrados en la defensa y conectados a una aplicación permiten conocer el nivel de ocupación del muelle. El producto se encuentra en un estado de desarrollo de prototipaje y análisis del modelo de negocio en el marco del programa Blue up , fruto de la colaboración entre Barcelona Activa y el Puerto de Barcelona.
Las menciones para esta categoría fueron dos. Fix, una malla para retener microplásticos, de Maria Mei Bellsolà, Núria Fandos y Mario Sanz, estudiantes de la Escuela Universitaria de Diseño e Ingeniería de Barcelona Elisava. Se trata de una malla filtradora para retener los residuos húmedos de la lavadora que contienen partículas microplásticas. Una vez filtrados, los microplásticos se transforman en un nuevo material compuesto cuando se mezclan en un 3% con polipropileno reciclado, de forma que quedan encapsulados y no se liberan en el medio natural. Con este nuevo material, pueden producirse pellets o filamentos para impresión láser 3D.
La otra mención ha sido para Ex·tèrra, papel y tinta de hojas de alcachofera, diseñado por Carolina Galeazzi, del IED Barcelona Centro Superior de Diseño. La fabricación es a partir de las hojas y tallos de la alcachofera, parte de la planta no comestible que se descarta y que se trata como residuo agrario. Mediante un proceso de cocción de las hojas con carbonato sódico, se separa su celulosa para hacer el papel y la lignina soluble para la tinta. El resultado es un material biodegradable, compostable y reciclable que ha sido testado en diferentes aplicaciones para probar su funcionalidad.
Incentivando soluciones sostenibles e innovadoras
El Premio Cataluña de Ecodiseño promueve y reconoce las prácticas e iniciativas que buscan la integración de valores ecológicos en los productos y proyectos de diseño con el fin de incentivar la creación de soluciones innovadoras que contribuyen a la sostenibilidad y el desarrollo sostenible. Este año, el premio estrena nueva imagen con el fin de facilitar su reconocimiento en el sector. El nuevo símbolo representa la unión de tres conceptos clave de la economía circular: reducir residuos y recursos (-), multiplicar su vida útil (x) y dar un valor adicional a los productos (+).
La Generalitat promueve hace años el diseño para el reciclaje para dar salida a los materiales reciclados que se obtienen a partir de la recogida selectiva de los residuos municipales, industriales y de la construcción, y, por otra parte, incentivar que los nuevos productos que se fabrican se diseñen pensando en un futuro reciclaje y que generen la mínima cantidad de residuos. Actualmente, con el ecodiseño, se busca que los productos tengan en cuenta también el resto de aspectos ambientales como el consumo de agua y energía, emisiones a la atmósfera, etc.
El Gobierno tiene en marcha un programa interdepartamental de ecodiseño para lograr la reducción del consumo de materias primas y energía, de la generación de residuos y de emisiones y de los costes asociados. Se trata de favorecer un entorno adecuado para dar un valor añadido y responsable a los productos y servicios producidos y comercializados en Cataluña, al tiempo que se obtiene también una mayor competitividad en el mundo empresarial y una mayor responsabilidad social y ambiental. También ha elaborado la Estrategia catalana de ecodiseño para una economía circular y ecoinnovadora, una herramienta de ecoinnovación que tiene como objetivo promover la economía circular mediante el reciclaje y una mayor sostenibilidad a la hora de producir y consumir productos.