Primer vehículo reglamentario para el transporte de residuos peligrosos en Colombia

Este proyecto de la Escuela de Diseño Industrial de la U.N. cumple con la Resolución 1164 de 2002, con la que se adopta el Manual de Procedimientos para la Gestión Integral de los Residuos Hospitalarios y Similares, y el Decreto 351 de 2014, por el cual se reglamenta la gestión de estos materiales.

En la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) han desarrollado el primer furgón para el transporte de residuos biológicos y material infeccioso que cumple con la Resolución 1609 de 2002, que regula el manejo y transporte terrestre automotor de mercancías peligrosas en Colombia.

Se trata además del único vehículo en el mercado cuyo chasis se conecta con el suelo para transportar este material, el cual se guarda en contenedores independientes. De esta manera, se evita el esparcimiento de residuos peligrosos en el entorno y daños en la salud de los operarios.

La máquina es el resultado de un proyecto de la Escuela de Diseño Industrial de la U.N., liderado por Jorge Sanabria, quien afirma que “es el vehículo el que se adapta a la actividad y no al contrario”.

El furgón evita que los residuos peligrosos sean levantados por la persona y que, además, en un movimiento inesperado, se dispersen. El chasis baja al nivel del suelo junto con unas pequeñas rampas dispuestas a 45 grados, para introducir las cargas transportadas en contenedores sobre ruedas, cuya capacidad es de 55 galones (algo más de 200 litros).

Este vehículo posee un sistema de recolección de líquidos por vertimiento de lixiviados, gracias a la incorporación de tinas y llaves de vaciado. “Por exigencia, tenemos señalizaciones, a partir de lo acordado por Naciones Unidas, para identificarlo”, manifiesta su diseñador.

El furgón está formado por once módulos independientes, nueve para transportar los contenedores de residuos peligrosos y dos para los utensilios de los operarios

Según explica, se usó la normativa internacional ECE de iluminación automotriz, que exige distribuir la luz en sentido lateral y ubicar bombillas led en la parte superior del camión para advertir sobre su paso, al igual que alertas auditivas y de perifoneo.

“El sistema de gestión ambiental de la Universidad tiene total autonomía en el furgón y puede utilizarlo cuando sea necesario, ya que varían los momentos de mayor necesidad de recolección. En el vehículo, la cabina de los operarios está separada de los módulos en los que se almacenan los contenedores”, explica Sanabria.

Por cada viaje es capaz de soportar alrededor de una tonelada de residuos biológicos y sustancias infecciosas, lo cual favorece el transporte de material de desecho de laboratorios y de centros de estudio de Biología, Odontología, Medicina Veterinaria, Medicina, los institutos de Genética y Biotecnología, entre otros.

Capacidad

En total son once módulos independientes, de los cuales nueve son destinados a transportar los contenedores de residuos y dos para los utensilios de los operarios.

Transporta residuos peligrosos de tipo anatomopatológico y biosanitario. Los primeros se refieren a la biomasa obtenida de partes del cuerpo de animales, que tiene menor volumen y mayor peso. Estos deben almacenarse en los tres compartimentos posteriores del vehículo.

Los segundos son los más livianos, pero abarcan mayor espacio, como vendajes, algodón y aserrín contaminado de las camas de los animales. Estos se almacenan en los módulos laterales.

Este proyecto de la Escuela de Diseño Industrial de la U.N. cumple con la Resolución 1164 de 2002, con la que se adopta el Manual de Procedimientos para la Gestión Integral de los Residuos Hospitalarios y Similares, y el Decreto 351 de 2014, por el cual se reglamenta la gestión de estos materiales.

La consecución de este furgón forma parte del plan de inversión de la U.N. Sede Bogotá y compone una de las fuentes de transporte de residuos, junto con los vehículos que trasladan material de posconsumo, así como sustancias biodegradables y químicos.

Fuente:
Agencia de Noticias UN