El programa de prevención de residuos municipales de Palma prevé introducir el pago por generación

El documento contempla una serie de medidas para reducir la cantidad de residuos generados en la ciudad, como el fomento del compostaje doméstico, la prohibición de ciertos productos desechables o el impulso de la reutilización.

La sesión plenaria del Ayuntamiento de Palma celebrada el pasado jueves aprobó inicialmente el Programa local de prevención de residuos municipales de Palma. El documento, que se somete ahora a exposición pública, prevé la introducción de un sistema de pago por generación, es decir, el establecimiento de una tasa de basuras que varía en función de la cantidad de residuos producidos.

La meta que se plantea en el programa para el año 2020 es una reducción del 10% del peso total de los residuos generados respecto al año 2010. Pasando de las más de 211.0001 toneladas en 2010 a 190.000 toneladas en 2020 (esto supone realmente una reducción del 18% respecto de 2017).

24 acciones y 8 líneas estratégicas

Para alcanzar los objetivos propuestos en el documento se describen 24 acciones enmarcadas dentro en 8 líneas estratégicas. Algunas de las acciones que podríamos destacar serían la creación de circuitos para aprovechar excedentes de alimentos o el fomento del compostaje doméstico. También se recoge la necesidad de reducir los residuos en los eventos deportivos y fiestas en la ciudad.

Por otro lado, se incide en la necesidad de reducir los envases de comida para llevar, el uso del vidrio en el sector de la restauración, la reducción de la publicidad en papel o la prohibición de las bolsas de plástico y las vajillas de un desechables, como ya establece la recientemente aprobada ley balear de residuos.

Cabe destacar las medidas dirigidas al fomento de la reutilización, como el apoyo a los mercados de segunda mano o intercambio, o la reutilización de libros de texto, la formación en reparación y mantenimiento de electrodomésticos, bicicletas, etc., o la puesta en marcha de el espacio de reutilización en el parque verde de Son Castelló.

Otro aspecto a destacar es el impulso del consumo del agua del grifo para reducir del consumo de botellas de plástico. Asimismo, se quiere fomentar la compra responsable, incidiendo en el fomento de los productos poco envasados y empaquetados. También se hace especial énfasis en la ambientalización interna del propio Ayuntamiento para la prevención de residuos.

Concienciación y fiscalidad

Estas medidas y otras que se recogen en el programa vienen acompañadas de dos acciones transversales fundamentales: por un lado las actuaciones de concienciación, información y educación sobre la necesidad de reducir los residuos, sus impactos sociales y ambientales y las ventajas de la reutilización y la prevención. Por otra parte, es muy importante la introducción de un sistema de pago por generación, definiendo los instrumentos económicos y fiscales asociados para hacerlo posible. En esta línea ya trabaja el Ayuntamiento para modificar la tasa de residuos.

Tal y como declaró la concejala de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal, Neus Truyol, «hoy es un día importante para la ciudad, Palma es pionera en medidas de estas características y es el primer municipio de las Islas Baleares que cuenta con este programa. Debemos acabar con la incultura de usar y tirar y hacer un cambio de paradigma, no tenemos que hacer solo recogida y tratamiento de residuos, tenemos que tomar medidas para reducir la cantidad de residuos «.

Este programa será el primero que tendrá Palma en materia de prevención de residuos y dará cumplimiento a un mandato legal ya establecido en la ley estatal de residuos de 2011. Se cumple así con una obligación legal y una necesidad ambiental de invertir la tendencia de incremento continuado de la producción de residuos. Incorpora también las nuevas obligaciones de la recientemente aprobada Ley 8/2019 de 19 de febrero, de residuos y suelos contaminados de las Islas Baleares en materia de prevención de residuos.