La finalidad principal de este proyecto, coordinado por CARTIF, es la puesta en marcha de un prototipo de planta de demostración para el reciclado de residuos de poliestireno expandido, para obtener perlas de este material, que, una vez reciclado, se utilizará para fabricar prototipos de envases de gran calidad para la industria alimentaria.
El EPS (poliestireno expandido) es un material plástico que se utiliza en sectores como el embalaje o la construcción, pero que presenta serios problemas para su reciclaje, ya que es un plástico derivado del petróleo y por tanto no biodegradable. En la actualidad solo se recupera el 50% de los residuos de EPS, que acaban en un vertedero o siendo incinerados, una salida poco sostenible a nivel medioambiental. Con el objetivo de valorizar estos residuos para que puedan ser reaprovechados de nuevo en la industria, y así cerrar su ciclo de vida, CARTIF, Turqueplast, Grupo El Árbol y Quercus, han puesto en marcha el proyecto COLRECEPS, cuya reunión de lanzamiento se ha celebrado hoy en las instalaciones del centro tecnológico vallisoletano.
COLRECEPS está cofinanciado por la UE a través de la convocatoria LIFE+, con un presupuesto cercano a los 1’2 millones de euros.
Está previsto que en los próximos tres años Turqueplast y CARTIF pongan en marcha una planta demostrativa, en la que tratarán de industrializar este sistema de reciclado de forma piloto tomando como base el área urbana de Valladolid. Esta planta, que en principio estaría lista en 2014, tendrá una capacidad de gestión aproximada de 500 kgs/día, lo que supone unas 146 toneladas año. Si el modelo resulta económica y medioambientalmente viable, la planta ampliaría su capacidad para gestionar todos los residuos que se generan en Valladolid.
Foto portada: Flickr David Gilford (cc)