IBERDROLA lidera el proyecto CO2FORMARE, que pretende utilizar de manera eficiente el CO2 procedente de los ciclos combinados para sustituir productos químicos clorados en el control de la suciedad de los equipos de refrigeración.
IBERDROLA ha puesto en marcha el proyecto europeo de I+D CO2FORMARE, dotado con más de 4 millones de euros de presupuesto, con el que pretende demostrar que el uso del CO2 proveniente de las centrales térmicas puede ser un sustituto eficiente de los productos químicos clorados empleados actualmente para el control del macrofouling (ensuciamiento de los sistemas de refrigeración).
El coordinador de este proyecto LIFE, Elías Rodríguez, explicó detalladamente las bases de una iniciativa que persigue “demostrar que se puede utilizar de manera eficiente el CO2 proveniente de los ciclos combinados para sustituir productos químicos clorados para el control de la suciedad de los equipos de refrigeración”.
El macrofouling es el ensuciamiento de los sistemas de refrigeración de centrales energéticas causado por moluscos, como los mejillones o similares. Las larvas de dichos organismos se fijan sobre estas estructuras de hierro o acero y al crecer causan la obstrucción de los sistemas, por lo que impiden la circulación del agua necesaria para el correcto funcionamiento de las instalaciones.
IBERDROLA GENERACIÓN lidera este proyecto, en el que participan otros seis socios españoles: la filial de ingeniería de IBERDROLA, el Cluster de la Energía de la Comunidad Valenciana, Idesa Fabrication, el Centro Tecnológico del Agua (CETaqua), Nalco Española y la Compañía de Tratamiento de Aguas OX-CTA.
El proyecto CO2FORMARE se va a desarrollar en la central de ciclo combinado de Castellón, donde se comprobará el efecto del CO2 como inhibidor del macrofouling con el fin de validar su idoneidad y, asimismo, poder aplicar los resultados obtenidos en el resto del parque térmico de generación en Europa.
Descripción del proceso
Para llevar a cabo este proyecto, el CO2 procedente de la combustión de gas natural en la central de Castellón será capturado mediante una novedosa tecnología de absorción desarrollada por Westec Environmental Solutions. Basada en la absorción en co-corriente, el método aumenta significativamente la eficiencia del proceso y, una vez disuelto el CO2 en agua para conseguir los efectos biocidas esperados, se confía en poder combatir eficazmente el mencionado problema del macrofouling.
Cabe destacar el apoyo de las instituciones valencianas al proyecto liderado por el Grupo IBERDROLA. En esta línea, tanto el Ayuntamiento de Castellón como la Generalitat Valenciana y la Universidad Jaume I se han comprometido a participar, junto al resto de los socios, en el comité de seguimiento de esta iniciativa medioambiental.
Al acto de lanzamiento del proyecto, que tuvo lugar la pasada semana en la central de ciclo combinado de Castellón, asistieron la consellera de Infraestructuras y Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana, Isabel Bonig; el alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, y el rector de la Universitat Jaume I, Vicente Climent. En representación de la Compañía estuvieron presentes Fernando Diago, consejero de IBERDROLA España; Óscar Fortis, director de Generación Térmica; el delegado regional, Julián Bolinches, y Pablo Pirles, director de la central castellonense.
Esta iniciativa se suma a otras impulsadas por el Grupo IBERDROLA que persiguen el aprovechamiento del CO2 emitido por las centrales térmicas de generación, como el LIFE CO2ALGAEFIX, el CENIT Sost-CO2 o el de seguimiento de la incidencia del mejillón cebra en el ciclo de Castejón (Navarra).
El programa LIFE busca soluciones innovadoras relacionadas con problemas medioambientales, destacando los resultados concretos medibles y no relacionados directamente con el desarrollo o inversión en tecnologías ya existentes.