La compañía australiana elimina mil artículos de plástico de un solo uso en su ruta entre Sidney y Adelaida y se compromete a reciclar, reutilizar y compostar los residuos que se generen durante el vuelo, que alcanzan las 150 toneladas anuales.
El primer vuelo comercial sin producción de residuos se lanzó al cielo el pasado viernes, marcando el inicio del plan de la aerolínea australiana Qantas para eliminar 100 millones de productos plásticos de un solo uso para finales de 2020 y eliminar el 75% de los desechos de la aerolínea para 2021. Así, todos los productos a bordo del vuelo QF739, que viaja desde Sydney a Adelaida, se eliminarán mediante compostaje, reutilización o reciclaje.
«En el proceso de transportar a más de 50 millones de personas cada año, Qantas y Jetstar producen actualmente una cantidad de residuos equivalente a 80 aviones Boeing 747 jumbo completamente cargados», dijo Andrew David, CEO de Qantas Domestic.
David explicó que el vuelo entre Sidney y Adelaida produce habitualmente 34 kilogramos de desechos, lo que supone que esa ruta genera 150 toneladas de residuos al año.
Con esta nueva iniciativa, alrededor de 1.000 artículos de plástico de un solo uso se han sustituido por alternativas sostenibles o se han eliminado por completo del vuelo, incluidas las porciones de alimentos envasadas individualmente.
Los productos alternativos utilizados durante el vuelo incluyen recipientes de comida hechos de caña de azúcar y cubiertos hechos de almidón, todos ellos completamente compostables. Al final del servicio de comidas, la tripulación de cabina recolecta los artículos que quedan para reutilizarlos, reciclarlos o compostarlos.
Salas de espera «verdes»
Además, los clientes utilizan pases de embarque digitales y etiquetas de maletas electrónicas siempre que sea posible, con personal disponible para asegurarse de que cualquier pase y etiqueta de papel se eliminan de forma sostenible.
Igualmente, las salas de espera de Qantas en la terminal del aeropuerto de Sydney también serán «verdes», con depósitos para múltiples flujos de residuos.
Con el objetivo de eliminar 100 millones de artículos de plástico de un solo uso cada año, Qantas y su filial de bajo coste, Jetstar, reemplazarán 45 millones de vasos de plástico, 30 millones de juegos de cubiertos, 21 millones de tazas de café y 4 millones de fundas de reposacabezas por alternativas sostenibles.
La iniciativa de reducción de desechos de la aerolínea ha recibido el nombre de «The Bowerbird Project», en referencia al ptilonorrínquido o ave de emparrado, que reutiliza pequeños trozos de plástico.
Además, las emisiones de carbono del vuelo «residuo cero» serán 100% compensadas por la compañía.
En 2012 Qantas y Jetstar operaron los primeros vuelos de prueba con biocombustibles de Australia, y el año pasado, Qantas operó el primer vuelo impulsado por biocombustible entre Australia y los Estados Unidos utilizando un biocarburante procesado a partir de semillas de mostaza.