El proyecto europeo VIBES modificará molecularmente materiales compuestos termoestables, haciéndolos más ecológicos, reciclables y aptos para convertirse en materia prima de una segunda generación de productos para las industrias aeronáutica, naval y de construcción.
Los materiales compuestos termoestables han ganado popularidad a escala industrial en los últimos años debido a las interesantes propiedades que presentan (alta resistencia mecánica, buena resistencia química, durabilidad, ligereza y resistencia a la corrosión). Sin embargo, el final de su vida útil sigue presentándose como un problema medioambiental. En el marco del programa Horizonte 2020, el proyecto VIBES, liderado por el centro tecnológico aragonés Aitiip y financiado por la Comisión Europea con más de cinco millones de euros, se ofrece como solución, proponiendo una innovadora tecnología de recuperación de componentes, mediante el desarrollo de un nuevo y mejorado material termoestable, a partir de modificaciones químicas en su materia prima. Un material ecológico con propiedades de reciclaje inherentes, que se empleará en una segunda generación de productos para sectores industriales clave.
La industria ha aumentado su interés por los materiales de alto rendimiento, lo que hace a los termoestables componentes muy atractivos para aplicaciones de ingeniería avanzada en sectores como la aeronáutica, la automoción, el sector naval, la construcción, la energía, los deportes o la electrónica. Ante la alta demanda, Europa busca garantizar un ecosistema sostenible, en el que estos materiales puedan reutilizarse, otorgándoles así una nueva vida. La prolongación de la vida útil de los materiales compuestos en al menos una aplicación adicional (gracias a la recuperación de los componentes de VIBES), supondría un ahorro anual de al menos 160.000 toneladas de CO2.
La tecnología VIBES podría tratar al menos el 28% del total de residuos de compuestos termoestables y contribuiría a reducir en un 40% la cantidad de estos compuestos que actualmente terminan incinerados, en vertederos o contaminando el medio ambiente. Esta solución garantizaría la sostenibilidad medioambiental, sustituyendo los actuales materiales compuestos -de base fósil- por alternativas 100% biobasadas. Reducir la dependencia en las materias primas basadas en petróleo permitiría asimismo rebajar las emisiones de CO2 en un 20%.
Tecnología de modificación molecular
El proyecto VIBES se presenta como solución sostenible para mejorar la capacidad de reciclabilidad de los materiales compuestos termoestables, a través de una tecnología de reciclaje innovadora, más ecológica, rentable y limpia, gracias al desarrollo de un material de unión de base bio (BBM) personalizado.
VIBES centra su investigación en la estructura molecular del material termoestable, cuya matriz es modificada químicamente, ya sea epoxi, poliéster o vinil éster. Esta mutación a escala molecular refuerza la composición del material, mejorando sus propiedades técnicas, permitiendo una posterior separación de los componentes, por lo que el material podrá reciclarse y reutilizarse como nueva base de productos (piezas, estructuras, etc.).
Las propiedades mejoradas de los materiales compuestos termoestables y la tecnología de reciclaje desarrollada en en este proyecto reduciría los residuos generados, favoreciendo además una mayor rentabilidad en el proceso de producción. En el marco de VIBES, se desarrollarán productos de alto valor añadido, devolviendo al mercado los productos obtenidos del proceso de reciclaje, promoviendo así la economía circular. Se esperan beneficios significativos en términos de generación de puestos de trabajo, estimulación de inversiones y políticas de futuro para la lucha contra el cambio climático.
El consorcio del proyecto, liderado por Aitiip (España), cuenta además con trece socios de siete estados miembros de la UE.